¿Canarias está preparada para afrontar de forma eficiente y eficaz un accidente aéreo?
Sí. En asistencia considero que se ha hecho bastante camino, pues tenemos bastantes lecciones aprendidas desde que ocurriera el accidente de Spanair en 2008, pese a que no nos tocó de lleno porque el incidente sucedió en el aeropuerto de Madrid. También de la actuación en el caso del Germanwings. Poquito a poquito vamos acumulando lecciones aprendidas y mejorando los protocolos de actuación en la asistencia a víctimas.
¿En el accidente de Spanair se pudo actuar con mayor rapidez?
La normativa vigente actual es posterior a ese incidente. Es verdad que a partir de ese siniestro las asociaciones hicieron bastante hincapié y trabajo para que toda esta normativa se publicara, no solo a nivel nacional, sino también en la esfera internacional. Aún estamos en la punta del iceberg, pero con estos seminarios y otras acciones formativas estamos trabajando en ello. Lo que hemos querido es unificar criterios y formar equipos para actuar de forma coordinada.
Cuando sucedió el accidente, ¿qué carencias salieron a flote?
Principalmente la coordinación. Estamos hablando de que hay muchos intervinientes y es necesario poder actuar en una misma línea.
¿Ahora falla la comunicación?
No está fallando, pero sí hay que limarla porque cada accidente y simulacro en el que participamos es distinto. Necesitamos, por ello, diferentes protocolos por las distintas necesidades que presentan las familias. La base está y, en el caso de Canarias, de forma muy consolidada.
¿Tienen que suceder accidentes de esa magnitud para darse cuenta de la importancia de que haya un plan bien ajustado y coordinado?
No. Estamos en una época bastante importante en lo que al desarrollo de planes de actuación en emergencias se refiere. Nos estamos dando cuenta de que es prioritario formarnos, hacer protocolos de actuación y dar cabida a todos los intervinientes; no solo a los que activan los planes, sino tanto a los agentes externos como los internos.
¿Se producen solapamientos entre el plan regional, el aeroportuario o el de la compañía?
No, porque el real decreto 632/2013 es bastante claro e indica específicamente las funciones de cada sector. Es decir, cada plan tiene sus misiones específicas y lo importante es engranarlos todos.
Usted es la persona de contacto en la comunidad, ¿qué funciones le corresponden como tal?
Represento a la Administración General del Estado tras ser designado por el subsecretario del Ministerio del Interior como persona de contacto titular para la Comunidad Autónoma. Cuando se activa el plan de Protección Civil, donde se enmarca mi función, nos ponemos manos a la obra y nos dirigimos a la sala y comenzamos a establecer la coordinación.
¿Cómo comunican el fallecimiento de un familiar?
No podemos obviar la realidad y cuando tenemos que dar un comunicado así hay que ser lo más realista posible. Eso sí, lo hacemos cuidando las formas y los momentos, sin dejar atrás datos importantes y poniendo en valor a esa persona que está atravesando una situación complicada. Además, siempre damos esa noticia con personal especializado en atención psicológica.
El listado con las personas a bordo del avión siniestrado se tiene que facilitar antes de las dos horas, ¿se cumple ese plazo?
Se ha cumplido en los últimos accidentes. Es difícil porque las compañías aéreas tienen sus procedimientos, pero ellos ya lo tienen figurado en sus planes. Cuando hacemos una asistencia a los familiares de las víctimas hay que tener muy presente que tratamos con personas que tienen un dolor. Nuestra función fundamental es darles información y cubrir las necesidades que ellos demanden para no incrementar más ese pesar.
Son frecuentes las quejas entra los familiares de víctimas por no disponer de mayor información sobre las investigaciones de este tipo de siniestros.
El problema es que nosotros no podemos dar datos que no estén contrastados y, además, jugamos con un hándicap: los medios de comunicación o las redes sociales. Es verdad que nuestra información tarda un poco más porque queremos que sea contrastada y que vaya a buen puerto. Es decir, que si un familiar ha sido atendido y trasladado a un hospital, sea esa la verdad.
¿El hecho de que Canarias tenga ocho aeropuertos y un tráfico aéreo elevado, qué implica en el diseño de los protocolos?
Existe una realidad en Canarias que no se puede obviar. Tenemos un gran volumen de pasajeros y ocho aeropuertos y, con ellos, ocho protocolos de actuación. Estamos en la pista. Esta semana hubo un incidente en el aeropuerto de Tenerife Sur y estamos expuestos a un riesgo, por lo que las administraciones debemos estar preparadas para afrontarlo. Lo bueno es que se designó a una persona de contacto en cada aeropuerto en 2016. Si cae un avión en La Gomera, nos pueden cerrar el aeropuerto, por lo que dependemos de barcos para llegar a esa isla. Que en los primeros momentos del accidente haya una persona allí es fundamental.
El subdelegado del Gobierno en Las Palmas
Sí. Como dije antes, hemos aprendido de los que nos ha pasado en el pasado y La Escuela Nacional de Protección Civil está dedicando bastante potencial en formación.
