Los socialistas canarios viven hoy una cita histórica. Es la primera vez que los militantes eligen directamente a su secretario/a general para los próximos cuatro años tras unos años convulsos en el seno del partido y una larga interinidad que le ha debilitado frente a otras formaciones, sobre todo tras la salida del PSOE del Gobierno regional después de cinco años cogobernando con Coalición Canaria. Los equipos de campaña de los tres aspirantes a dirigir el partido coinciden en que la contienda será igualada y que el candidato que gane será por pocos votos sobre el segundo.
Una diferencia escasa entre los candidatos puede tener consecuencias positivas o, al contrario, muy negativas para el devenir futuro del PSOE. La integración y la unidad interna entre los socialistas canarios se vería seriamente socavada si el nuevo líder de la formación no realiza realmente un ejercicio de generosidad con sus rivales.
Los socialistas de las Islas llevan prácticamente diez años en una situación interna de división y pugnas que quedaron algo solapadas con la entrada del PSOE en el Gobierno en 2011. Pero las labores de cogobierno entre 2011 y 2016 no han solucionado un escenario dominado por la debilidad política, fuga de militantes, agrupaciones cerradas, escaso debate interno y enfrentamientos entre familias y sectores.
Este es el reto que tiene por delante el secretario/a general que salga hoy de la votación de los afiliados. Tanto Patricia Hernández, como Ángel Víctor Torres y Juan Fernando López Aguilar han hecho especial hincapié en la formación de los militantes, en convertir las agrupaciones y locales del PSOE en lugares de debate, en incentivar la subida de afiliados o en escuchar más las propuestas de las bases para que lleguen a los órganos de dirección.
Pero más allá de la mayor o menor semejanza entre las propuestas de los candidatos para el consumo interno de los afiliados, el PSOE se juega su ser o no ser de cara a las elecciones autonómicas y municipales de 2019. El debate sobre los pactos ha estado muy presente en la larga campaña de las primarias que se celebran hoy. El exsecretario general Juan Fernando López Aguilar fue muy contundente desde el principio y la exvicepresidenta del Gobierno, Patricia Hernández, le siguió en su negativa total a volver a pactar con CC. Ángel Víctor Torres también se sumó a este carro apostando por un amplio frente de izquierdas a semejanza del existente en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria o en el Cabildo grancanario.
Pero, más allá de las declaraciones oficiales, el hecho es que la estrategia de los pactos ha sido utilizada en las redes sociales y entre los partidarios de unos y otros para lanzarse críticas y descalificaciones. La "guerra sucia" también ha estado presente en esta campaña a medida que se ha ido acercando la fecha de la votación con mensajes, memes y montajes. Los grupos de wasap y redes como Twitter y Facebook arden en estos días con todo tipo de comentarios de unos a otros para debilitar al adversario frente al militante.
Claves
La clave para la victoria en las primarias es el control de la mayoría de los votos en una de las islas capitalinas y sacar el máximo número de apoyos en, al menos, dos islas no capitalinas. Por eso tanto Patricia Hernández como Ángel Víctor Torres han centrado buena parte de sus campañas en amarrar el voto de Tenerife -en el caso de Hernández- y de Gran Canaria -donde domina Torres-. Ambos candidatos también han intentado socavar la isla del contrario, además de buscar votos en La Palma, Fuerteventura y Lanzarote, islas que al final inclinarán la balanza a uno o a otro lado.
En el caso de Juan Fernando López Aguilar, sus partidarios sueñan con un campanazo del eurodiputado y exministro. El que ya fuera secretario general del PSOE canario entre 2007 y 2010 ha realizado una campaña apelando al corazón socialista de las bases y presumiendo de no contar con el apoyo del aparato del partido.
Ahora queda por ver qué votan los 6.793 militantes que tiene el partido en Canarias. Los tres candidatos obtuvieron los avales necesarios para mantenerse en la campaña. Las dudas que se cernían sobre la continuidad de López Aguilar fueron despejadas al conseguir un millar de avales -el mínimo eran 679- y con la rumorología desde alguna candidatura de que se le había "ayudado" para conseguirlos. También en algún momento se desataron las especulaciones interesadas sobre una posible fusión de dos de las tres planchas. De hecho, hubieron conversaciones entre miembros de las distintas opciones para alcanzar algún acuerdo que permitiera una candidatura común, lo que fue rápidamente desechado dadas las diferencias que separan, por ejemplo, a Patricia Hernández y Ángel Víctor Torres.
A partir de mañana los socialistas inician una nueva etapa que tendrá su segundo capítulo en el congreso regional que se celebrará el 16 y 17 de septiembre. El candidato/a que se alce con la Secretaría General tendrá ante sí la ardua tarea de recomponer un partido que, pese a todo, fue el más votado en 2015 y que cuenta con un voto fiel en todas las Islas. Los dos años que restan de legislatura estarán marcados por la inestabilidad política, tras la ruptura de las negociaciones entre CC y PP para un pacto, pero los socialistas tendrán que prepararse con el nuevo liderazgo, discurso y programa para tener opciones de alcanzar la Presidencia del Gobierno por tercera vez en la historia autonómica.
De 10.00 a 20.00 horas estarán abiertas las agrupaciones socialistas de las Islas para que los afiliados voten bajo el control de 600 personas entre miembros de mesas, interventores y apoderados.
