La hoja de ruta prevista para la agenda canaria en la política nacional ha saltado por los aires. El nuevo aplazamiento de la aprobación en Consejo de Ministros del proyecto de ley de Presupuestos del Estado para el 2018 como consecuencia de la situación en Cataluña por el referéndum independentista del próximo domingo deja en el aire las medidas comprometidas por el Gobierno central en relación con el Archipiélago, entre ellas el aumento previsto en el Fondo de Competitividad, que debía pasar de los 220 millones que llegaron este año a los 360, y que se destinan a financiar los servicios esenciales -educación, sanidad y servicios sociales-. La mayoría de estas medidas están sujetas a la aprobación de unas nuevas cuentas públicas para el próximo año, como reconoció el martes en el Senado el ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro, pero la retirada momentánea del PNV de las negociaciones en espera de lo que suceda en Cataluña deja un horizonte de incertidumbre que en las Islas se considera "preocupante".
La idea generalizada es que todo dependerá de lo que ocurra el 1-O, tanto en relación con el desarrollo de la propia jornada como el día después. Nadie duda por ello que no se moverá nada políticamente en Madrid hasta ver cómo transcurren los primeros días tras el plebiscito ilegal. En este contexto, el aplazamiento del proyecto de presupuestos obligará a una más que probable prórroga de las cuentas ahora en vigor al menos unas semanas en enero, pero se corre el riesgo de que los acontecimientos catalanes impida retomar las negociaciones presupuestarias y que la prórroga sea definitiva, quizá asociada a un adelanto electoral. Con todo, el ministro de Economía, Luis de Guindos, aseguró ayer que "tenemos tiempo todavía para que pudieran entrar en vigor el 1 de enero".
El Gobierno de Canarias y la propia CC se mostraban ayer cautos sobre el escenario abierto, combinando sensaciones contrapuestas sobre el verdadero alcance del anuncio realizado por Montoro. De un lado reconocen la apertura de un "marco de inestabilidad", como señaló la portavoz del Gobierno regional y consejera de Hacienda, Rosa Dávila, pero al tiempo confían en que en unas pocas semanas se pueda reanudar la dinámica política para contar a principios de enero con nuevos Presupuestos, para cuya aprobación el Ejecutivo del PP necesita el concurso no sólo de Ciudadanos, con quien tiene cerrado un principio de acuerdo, o el de la propia CC, también muy ultimado, sino el del PNV y el diputado de NC, Pedro Quevedo. Son los apoyos con los que Montoro contó para las cuentas del 2017 y los que sigue confiando en cerrar para los de 2018. Montoro ha advertido que sin nuevas cuentas estatales la agenda canaria quedaría estancada y en eso coinciden todos los partidos canarios excepto Podemos.
Dávila dijo ayer que el aplazamiento es una "decisión de naturaleza política para superar el 1-O", y apeló a la "responsabilidad, a la sensatez y al diálogo" de los partidos para salir del atasco. Reconoció que la situación "afecta a la estabilidad sobre el marco en el que se tiene que desarrollar el propio presupuesto de la comunidad autónoma" y que "es importante lo que suceda a partir de ahora". La consejera insistió en que la prórroga presupuestaria sería "una anormalidad", aunque considera que la voluntad del Gobierno central es poderlos tramitar a tiempo. "Las cuentas canarias se pueden aprobar en tiempo y forma, otra cosa es que el marco general genera incertidumbre", resaltó.
Convenios, inversiones y REF
Desde CC, Ana Oramas asumía ayer el condicionamiento a que está sometido el calendario presupuestario y la propia agenda canaria, pero aseveró que ésta "no está en riesgo". Cree que una vez se supere el 1-O se podrá recobrar el marco de negociación "lo antes posible" para alcanzar el escenario de aprobación de unos nuevos Presupuestos como el que se produjo en los de 2017, dando por hecho que en ese marco se seguirá avanzando en el desarrollo de la agenda canaria tanto en la actualización y mejora de inversiones y de ejecución de los convenios entre Canarias y el Estado, como en la reforma del REF económico, en la aprobación del nuevo Estatuto de Autonomía, y en la actualización del sistema de financiación autonómica.
Desde la formación nacionalista se confía en que la necesidad del PNV de contar con unos nuevos Presupuestos para poder desarrollar muchos de los acuerdos alcanzados para los del 2017 y la actualización pendiente del cupo vasco, también recientemente pactado con el Estado, llevará a este partido a recuperar la senda negociadora, una vez pasado el referéndum catalán.
Consecuencias negativas
Pedro Quevedo, de NC, insiste en recalcar que aún no ha tenido contacto con el Gobierno "para conocer el fondo de la decisión adoptada", y que tampoco ha iniciado ninguna negociación sobre los Presupuestos, por lo que cree que cualquier desarrollo futuro de la agenda canaria en cuanto a los planteamientos de esta formación dependerá de la disposición de Montoro a asumirlos. Quevedo no ve un horizonte claro en la política nacional como consecuencia del 1-O y no descarta ni una prórroga definitiva de las cuentas ahora en vigor, ni un adelanto electoral para los próximos meses. En ese caso, señala que "habrá que valorar qué ocurre con los acuerdos del 2017 que tienen aplicación en los de 2018", reconociendo que la prórroga "puede tener consecuencias negativas sobre la agenda canaria".
Desde el PP, su diputado Pablo Matos confía plenamente en que el PNV vuelva a las negociaciones, y cree que "no hay razones para que el Gobierno no pueda reeditar con los partidos que apoyaron los Presupuestos del 2017 el acuerdo alcanzado para los del 2018" reconociendo que los temas canarios se verán afectados por una prórroga de la actuales cuentas.
La portavoz del PSOE, Margarita Robles, consideró ayer "preocupante" la incapacidad del Gobierno para presentar las cuentas estatales y que eso demuestra la "soledad" en la que se encuentra, poniendo de relieve la "inestabilidad económica" a la que aboca esta situación. Aseguró que los socialistas están preparando unos presupuestos alternativos, lo que obviamente conlleva que rechazarán los que presente el Ejecutivo.
