Las elecciones autonómicas convocadas para el 21 de diciembre no son el final del desafío soberanista catalán sino, al contrario, el principio para revertir la actual situación. El exministro José Bono advirtió que los catalanes han padecido durante décadas "ese cargamento de mentiras, falsedades y vicios" y que ahora hay que cambiar para que los catalanes se vuelvan a sentir españoles. "Después del 21 de diciembre debe haber un clamor nacional en España para decirles a los catalanes que no se sienten españoles que no les atacamos a ellos, sino a los secesionistas que han dirigido esta operación y que nosotros no confundimos a Puigdemont con Cataluña, porque están intentando hacer lo mismo que hacía Franco y que consistía en convencer a la población que cuando se le atacaba a él también se atacaba a España".

Por eso el expresidente del Congreso parafraseó a Miguel de Unamuno para afirmar que "tenemos que convencer con inteligencia y generosidad y cometeríamos un error si creyéramos que ganar las elecciones del 21 de diciembre por los partidos constitucionalistas es el final, al contrario, es el principio para enamorar con una España en la que quepamos todos porque juntos podemos mucho más".

El veterano dirigente socialista apeló a vencer el miedo en la jornada electoral convocada por el Gobierno español, tras destituir al Govern de Puigdemont y disolver el Parlament catalán. Bono confía en que "la inmensa mayoría de los ciudadanos que forman parte de la Cataluña sensata salgan a votar el 21 de diciembre para que se pueda poner bien alto el planteamiento que establece nuestra Constitución, el miedo tiene que desaparecer", añadió.

Bono no quiso pronunciarse sobre los resultados de los sondeos o la posibilidad de que los partidos constitucionalistas puedan pactar una lista conjunta o un gobierno después de la cita electoral. Retirado de la vida política activa desde 2011, José Bono no ha querido ponerse de perfil frente al desafío independentista de Cataluña pero no entra en las estrategias internas de los partidos, incluido el suyo: "Yo podría buscarle complicaciones al PP, PSOE y Ciudadanos, lo que espero es que juntos seamos más que los insolidarios, mi opinión sobre este asunto ni está ni se le espera porque pertenezco a la jubilación activa", subrayó. En la misma línea se pronunció al ser cuestionado sobre la opción de Josep Borrell para encabezar la candidatura de los socialistas catalanes. El dirigente socialista elogió la figura de Borrell y sus discursos en las dos manifestaciones de Barcelona contrarias al independentismo, pero recordó que el PSC tienen sus propias estructuras orgánicas y que el candidato es Miquel Iceta, que también puso en valor.

Lo que sí es evidente es que, sea cual sea el resultado, el Estado tendrá que respetar el veredicto de las urnas. Para Bono "el Estado es el primer garante de la ley y debe obligar a quienes no quieran respetarlo a que lo hagan. Creo que van a perder los secesionistas pero debemos hacer lo posible para que triunfe la Constitución y la solidaridad en unas elecciones limpias y transparentes, no como en la farsa de referéndum del 1 de octubre. No hay otra alternativa que acatar los resultados y hacerlos cumplir".

Tampoco cree el expresidente castellano-manchego que haya que ilegalizar a los partidos que defienden la independencia porque cualquier formación que esté legalmente constituida tiene derecho a concurrir a los procesos electorales.

También hizo un llamamiento Bono para que los medios públicos catalanes, Catalunya Radio y TV3, "cesen en su planteamiento contrario al orden constitucional y que la junta electoral legalmente constituida sea capaz de que se sometan a la ley".

El exministro eludió pronunciarse si se le deberían retirar las competencias en Educación a Cataluña: "lo que hay que acabar es con los políticos que utilizan la educación para adoctrinar a los niños en la insolidaridad", aseguró.