En un comunicado divulgado hoy, la empresa estadounidense Odyssey se felicitó porque Jack M. Pizzo, juez que instruye el caso en un tribunal de Tampa (Florida), aceptase la petición de la firma de que España se comprometa a cumplir unas cláusulas determinadas antes de proceder a revelarle información precisa sobre el cargamento rescatado.

Pizzo ordenó el jueves a la empresa "cazatesoros" Odyssey que proporcione al Estado español la "localización" exacta del pecio y "la identidad del buque (hundido del que procede el tesoro)", así como acceso al contenido de la carga para "examinarla", dijo a Efe el abogado que representa al Gobierno español.

James Goold, letrado que representa a España, se mostró especialmente feliz con el fallo del magistrado a favor del Estado español, que ordena a Odyssey, dijo, que "nos entregue la información que hemos estado solicitando".

Para Odyssey, el tribunal "resaltó" en la conferencia que se celebró en la vista la "importancia de preservar el lugar" del que se extrajo el tesoro compuesto de monedas de plata y oro, valorado en más de 500 millones de dólares, unos (350 millones de euros).

La firma submarina, con sede en Tampa, manifestó ayer a Efe su satisfacción porque el acuerdo de confidencialidad sobre el pecio llegase al "punto en que podamos compartir información con España", pese al profundo desencuentro producido desde el principio.

"Dentro del espíritu de cooperación en la protección del lugar, Odyssey se ofreció a facilitar a España la localización precisa" del sitio arqueológico de donde se extrajo el tesoro, apunta en el comunicado.

El magistrado dio un plazo de catorce días a Odyssey para que proporcione al Gobierno español información detallada sobre el tesoro, que ha generado una sórdida batalla legal y que España reclama con firmeza.

Dicha 'orden de protección' permite a Odyssey continuar con futuras operaciones de exploración submarina en los sitios arqueológicos y "sanciona" cualquier "interferencia" que se produzca por parte del Estado español, de acuerdo con el comunicado.

El pasado 18 de mayo la empresa Odyssey anunció el hallazgo de un tesoro compuesto de monedas de plata y oro que, según el Ministerio español de Cultura, es un "cargamento extraído de un pecio de bandera española".

La decisión del juez supone un avance sustancial para las aspiraciones españolas de recuperar el tesoro, aunque Odyssey fundamenta sus derechos sobre el pecio en que el tribunal de federal de Tampa competente en jurisdicción marina le ha concedido el estatus de descubridor y depositario de todos los yacimientos recuperados en la disputa con España.

La denominada ley de Almirantazgo y la Convención del Mar establecen que el 90 por ciento del valor de lo recuperado corresponde a la empresa o personas que llevaron a cabo el rescate.