Carla Suárez afronta el final de la temporada 2016 pendiente del estado de su muñeca derecha. La grancanaria, que partió este viernes a Singapur para estar presente en las WTA Finals en calidad de suplente, y clasificada para competir en el torneo de Zhuhai la semana siguiente, atraviesa un tratamiento para paliar las molestias en su 1muñeca derecha. Obligada a retirarse en el torneo de Moscú días atrás, la canaria padece un ganglión con tenosinovitis de la musculatura extensa de antebrazo.

La jugadora, sometida a sesiones de electrólisis percutánea intratisular (EPI), una técnica de fisioterapia invasiva orientada a la recuperación de tejidos, trata de acelerar los plazos de rehabilitación de una dolencia cuya recuperación se estima entre 7 y 10 días, pudiendo extenderse hasta un mes en los casos más extremos.

"La prioridad es estar en las mejores condiciones para terminar la temporada" declara la canaria, en cuyos planes entra comenzar a entrenar desde el miércoles a baja intensidad para volver a familiarizarse con la pelota. "A estas alturas de temporada, con diez meses de competición acumulados, es habitual tener ciertas molestias. Quedan unos días muy ilusionastes por delante y los vamos a afrontar con el mejor ánimo", señaló Suárez.

"Durante ocho meses de la temporada ha estado en la Race entre las ocho mejores", recuerda Xavier Budó, entrenador de la tenista. "Ha sido una lástima porque la gira de Asia no fue buena. Este año ha tenido un nivel tenístico medio-alto todo el año. Ahora el objetivo es recuperarse de la lesión, ir de suplente a Singapur e intentar dar el mejor rendimiento posible en el Masters de Zhuhai", analizó sobre el tramo final. "Nos hemos quedado dos años a las puertas, luchando hasta la última semana. Pero hay que mirar la parte positiva. Carla se está moviendo en el top 10 en los últimos dos años y lo siguiente en su carrera es dar otro paso adelante"