La llegada de pasajeros a los ocho aeropuertos de las Islas en el primer trimestre del año (8,8 millones) y las reservas de slots (permisos de aterrizaje y despegue) para la temporada de verano hacen prever una cifra a final de año cercana al récord del siglo actual. Solo en 2008 la suma de los viajeros que aterrizaron o partieron de los aeródromos canarios entre enero y marzo (9,2 millones) superó a la alcanzada en este 2011.
Sin embargo, a partir de la mitad de ese 2008, que por el momento marca el récord del siglo en llegadas durante el primer trimestre, la crisis ya se empezó a dejar sentir con fuerza. Tanto, que los 34,01 millones con que cerró el año se quedaron lejos de los 34,8 millones del total de 2007, cifra que marca el récord anual. La progresión de crecimiento en 2011 tiende hacia los 35 millones de pasajeros.
Dentro ya del segundo trimestre, al acabar la Semana Santa, que a los efectos del transporte aéreo de pasajeros finaliza este lunes, habrán pasado 1,5 millones de pasajeros por los ocho aeropuertos canarios en las 11.225 operaciones de aterrizaje y despegue programadas. El flujo de viajeros supone un 9 % más que en la Semana Santa de 2010. Otro dato que suma de cara a romper el techo.
AENA ya ha hecho públicas sus previsiones para la temporada estival aeronáutica, más larga que la propiamente turística, ya que se extiende entre los dos domingos del año en que se producen los cambios de hora.
Según las estimaciones, el incremento previsto para Gran Canaria es del 7,1 %, lo que supondrá 472.000 pasajeros más que en 2010. Los crecimientos en Fuerteventura y Lanzarote serán de 450.000 (14,4 %) y 322.000 (8,7 %) pasajeros, respectivamente. Si pasamos a la provincia occidental, las previsiones incluso mejoran. Tenerife espera un incremento de 850.766 viajeros (18,2 %) más que el pasado año.
Reservas para el verano
Por su parte, el viceconsejero de Turismo del Gobierno de Canarias, Ricardo Fernández de la Puente, maneja un incremento de 1,1 millones de reservas de slots para el verano turístico. "Son cifras de los primeros días de abril", explicó.
Con estos datos en la mano al responsable turístico no le cabe duda de que "el verano va a presentar unas buenas cifras con respecto al año pasado". Es decir, llegarán más visitantes, que en su inmensa mayoría entrarán por los aeropuertos.
La gran duda estriba en el comportamiento que muestre en verano el turismo peninsular. Al contrario de lo que ocurre con los principales países emisores de turismo, España aún no muestra señales claras de recuperación económica, lo que se traduce en que la demanda de viajes en la Península no presente variaciones con respecto a años anteriores o, incluso, sufra un retroceso.
De hecho, según apunta el presidente del Patronato de Turismo de Gran Canaria, Roberto Moreno, "se prevé que haya un descenso del 2 % en turistas peninsulares en este verano" en toda Canarias.
Que la caída alcance solo los dos puntos porcentuales es responsabilidad principal de Gran Canaria. "En la Isla recibiremos un 3 % más de turistas peninsulares que el año anterior", asegura Moreno.
