Dentro de una semana ya será primavera y muchos españoles, instintivamente, añadirán: "en El Corte Inglés". Hasta ese punto están interiorizados los mensajes de la cadena de grandes superficies comerciales más importante de España, que celebra ahora sus 75 años. La empresa fundada por César Rodríguez y Ramón Areces en 1940, que tiene su germen en una pequeña sastrería del centro de Madrid adquirida por el primero de ellos, afronta ahora un cambio de estación. En la nueva temporada hay presencia de capital extranjero, una reestructuración de personal y activos, una apuesta por el comercio electrónico y un nuevo anhelo de internacionalización. En suma, una adaptación a los tiempos en la que tampoco se quieren perder las señas identidad, los nexos con los clientes tradicionales que han sido el sustrato de un negocio floreciente en todas las épocas. Siempre ha sido primavera en El Corte Inglés.
Las novedades, de Oriente
El pasado julio saltó la noticia: El Corte Inglés abría sus herméticas puertas, por primera vez en su historia, a un accionista extranjero. El jeque Hamad Bin Jassim Bin Jaber al Thani, miembro de familia real y ex primer ministro de Qatar estaba dispuesto a pagar cerca de 1.000 millones de euros por el 10% de la cadena de grandes almacenes. Hasta entonces todo el capital había estado en manos de la dinastía fundadora y de directivos y empleados de probada lealtad a la casa.
Con el dinero llegado de Qatar, el actual presidente de El Corte Inglés, Dimas Gimeno, quiere mejorar la salud financiera del grupo (la deuda llegó a superar hace tres años la barrera de los 4.000 millones) y afrontar la expansión internacional, una asignatura pendiente de su antecesor en el cargo, su tío Isidoro Álvarez, fallecido en septiembre de 2014 y sobrino segundo de Ramón Areces, anterior dirigente y sobrino a su vez de César Rodríguez, el primer presidente. Este último fue quien aportó el capital semilla para que el negocio germinara, un dinero que también llegó del exterior, ya que fue cosechado en Cuba.
Reformas en la casa
Otra vía de captación de fondos para afrontar la nueva etapa expansiva pasa por la venta de inmuebles. El Corte Ingles reconoció a principios de este mes que maneja un plan de enajenación de 200 activos inmobiliarios valorados en unos 1.000 millones de euros. "Se trata de pequeños locales y terrenos que no son estratégicos y cuya venta servirá para optimizar las cuentas", explicó Diego Copado, director de Comunicación de El Corte Inglés, que añadió que "es un porcentaje mínimo respecto a los 18.000 millones de euros en activos" que tiene la compañía.
Ahí están los 88 grandes almacenes de El Corte Inglés, los 43 hipermercados Hipercor y los más de 200 supermercados Supercor y Opencor, que forman parte de un conglomerado en el que también están las tiendas de bricolaje Bricor, las tiendas de moda Sfera, las Ópticas 2000, el medio millar de agencias de Viajes El Corte Inglés, los talleres Motortown, Informática El Corte Inglés, las tiendas Telecor, las librerías universitarias en diferentes campus? Una red que nació en 1935 con la compra de una sastrería especializada en la confección trajes de caballeros y ropas de niños de apenas 146 metros cuadrados con entrada por las calles Rompelanzas, Preciados y Carmen de Madrid.
Las tiendas jóvenes
El grupo El Corte Inglés cuenta actualmente con una plantilla a jornada completa de más de 80.800 trabajadores. Es uno de los grandes empleadores privados de España, pero la nueva dirección considera que sobra personal y es necesario rejuvenecer la plantilla. Este mes, la compañía acordó con los sindicatos su primer plan de prejubilaciones a gran escala, dirigido a 1.200 trabajadores con más de 58 años que cumplan determinadas condiciones.
Los sindicatos han ganado relevancia en los últimos años en una empresa en la que tradicionalmente sus trabajadores han estado muy identificados con la casa, que premiaba el trabajo duro y la lealtad con promociones internas y participación en el negocio siguiendo un modelo que sus dos primeros presidentes, César Rodríguez y Ramón Areces, habían mamado durante su estancia en Cuba, en la que habían trabajado en los almacenes El Encanto de La Habana.
El viaje al extranjero
El Corte Inglés nació como una sastrería, pero sus impulsores tenían desde el primer momento en la cabeza la puesta en marcha de un gran almacén por departamentos como El Encanto o los que, trabajando para el establecimiento cubano, habían conocido en Estados Unidos. Con el traslado, en 1939, a un edificio de la calle Preciados comenzará a tomar forma ese deseo de convertir el negocio en un gran almacén.
Un año después los Areces constituyen la sociedad El Corte Inglés y entre 1945 y 1946 se reforma totalmente el edificio, que pasa a disponer de 2.000 metros cuadrados en cinco plantas e inicia la estructura de venta por departamentos. En la década de los sesenta comienza la expansión con la apertura de un segundo gran almacén en Barcelona a los que seguirán, una vez fallecido César Rodríguez en 1966, los de Sevilla, Bilbao, Valencia, Murcia, Vigo, Las Palmas de Gran Canaria? hasta llegar a casi todas las provincias españolas. En 1980 El Corte Inglés dio el salto al exterior con la compra de los cinco centros de la cadena Harris de California, en Estados Unidos, pero los resultados no cumplieron las expectativas y en 1998 llegó a un acuerdo con Gottschalks, que absorbió la cadena a cambio de ceder a la firma española el 16% de sus acciones. Gottschalks quebró en 2009.
El Corte Inglés sólo tiene fuera de España un gran almacén, el abierto en 2001 en Lisboa. Es su única conquista exterior. Eso sí, durante décadas ha defendido con éxito su mercado nacional frente a los ataques extranjeros de grupos como Sears, Woolworth o Marks&Spencer, cuyos centros en España acabaron en manos de El Corte Inglés, al igual que ocurrió con su gran competidor nacional, Galerías Preciados.
El actual presidente del grupo, Dimas Gimeno, mantiene como objetivo salir al exterior. "La vocación sigue siendo expandirse fuera de España, pero de momento no está contemplado dar ese paso a corto plazo", señaló Diego Copado, responsable de Comunicación de la compañía.
El escaparate de internet
El Corte Inglés está centrando buena parte de su estrategia en el desarrollo del comercio electrónico, un segmento en el que fue pionero en España hace décadas con la introducción de la venta a distancia (La Tienda en Casa) y en el que acaba de introducir, por primera vez en el país, la entrega en dos horas gracias a la "capilaridad" de su red comercial, presente en casi todas las ciudades de España y de la que carecen competidores puramente online como Amazon. "El Corte Inglés ha sido un referencia en el comercio de España y su objetivo es continuar siéndolo gracias a la innovación constante y a la adaptación de su oferta a los cambios que demandan los clientes", señaló Diego Copado.
En sus primeros años de historia El Corte Inglés introdujo en España las técnicas de precio fijo, frente a la antigua práctica del regateo, la publicidad y el marketing, las campañas de rebajas o los nuevos conceptos de escaparatismo, estrategias que tanto Ramón Areces, como César Rodríguez y como su primo Pepín Fernández, el fundador de Galerías Preciados, habían aprendido en El Encanto de La Habana, en el que los tres trabajaron. "
Ya es primavera en El Encanto" era una de las frases publicitarias que hicieron fortuna en Cuba y que El Corte Inglés adoptó.
