AENA y Enaire se reunieron ayer con representantes de los sindicatos CCOO, UGT y USO con el objetivo de impulsar las negociaciones y desactivar la convocatoria de las 25 jornadas de paros de 24 horas anunciada a partir del próximo 15 de septiembre. Según comunicaron ambas compañías, el encuentro fue "positivo".

Esta reunión ya estaba prevista antes de registrarse los paros. Habrá otras dos en las próximas dos semanas. "La voluntad de diálogo de AENA y Enaire es firme. Ambas empresas comparten el planteamiento de base de los sindicatos en cuanto al incremento de plantilla y salarios", señaló el gestor aeroportuario en un comunicado.

Ambas empresas ya han trasladado al Ministerio de Hacienda la conveniencia de incrementar las plantillas por encima de la tasa de reposición, con objeto de dotar al gestor aeroportuario y al de navegación aérea del "capital humano adecuado" para atender los retos de los próximos años. Además, han puesto en conocimiento del ministro Cristóbal Montoro "la conveniencia de aplicar incrementos salariales acordes con los buenos resultados que se están obteniendo gracias al crecimiento del tráfico aéreo y a la excelente gestión".

En referencia a las huelgas previstas por trabajadores de las empresas que prestan el servicio de seguridad en los filtros de los aeropuertos, el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, valoró "muy positivamente" que, "al menos de momento", se hayan desconvocado. La situación ha dado un respiro al titular de Fomento que ha logrado así desactivar la propagación de los problemas vividos en El Prat.

Además, De la Serna abogó por abordar de manera global las condiciones laborales en seguridad, en del grupo de trabajo que se creará, sin que "en ningún caso" se sustituya la negociación sectorial. "Desde mi punto de vista, no tenía ningún sentido que se abordaran negociaciones desde distintos aeropuertos o desde las distintas áreas de la seguridad privada", sostuvo De la Serna, quien estimó que "lo que correspondía" era establecer con la representación de los trabajadores, y en el marco de la negociación sectorial, el "poder hablar de este tipo de cuestiones y cerrar acuerdos".

Por ello, se preguntó "para qué sirven" si no los convenios sectoriales o colectivos, si luego "cada uno puede alcanzar sus acuerdos de manera independiente" y "sin tener en consideración" estos o que sindicatos "muy minoritarios" y "algunos con un cierto sesgo radical pretendan imponer" unos que van en "línea distinta" a la negociación sectorial.

En otro orden de cosas, transcurrido el periodo de alegaciones, el Gobierno central oficializó ayer la designación del presidente del Consejo Económico y Social (CES), Marcos Peña, como árbitro entre los trabajadores de los controles de seguridad de pasajeros de El Prat y la empresa Eulen.

Fomento recordó que a la figura del árbitro se recurre cuando concurren las siguientes circunstancias: duración prolongada de la huelga o graves consecuencias de esta, que las partes mantengan posiciones irreconciliables, y perjuicio grave para la economía nacional.