La familia de Yéssica Mayara, la joven brasileña muerta de forma violenta en La Lajita, denunció ayer el desinterés y la desidia de las instituciones majoreras por el trágico crimen.

El portavoz de la familia, Leocadio Araya, reconoció que tres días después del homicidio de la chica "no se han puesto en contacto con nosotros tras el horrendo crimen machista". Además, señaló: "Ni siquiera han sido capaces de prestarnos ayuda psicológica en los momentos en que estábamos destrozados por la monstruosidad que cometieron con nuestra hija". Y añadió que "cuando lo hagan, ya será tarde".

Araya, compañero sentimental de la madre de Yéssica, arremetió contra los ayuntamientos de Pájara, donde residía la joven, y el de Tuineje, donde vive la familia, así como el Cabildo de Fuerteventura. También se muestra contundente contra "los concejales de Pájara y el consejero de Asuntos Sociales del Cabildo, que viven en La Lajita y no se han preocupado por nosotros lo más mínimo. Será porque somos pobres". Respecto al presunto homicida de Yéssica, aseguró: "Espero que el asesino de mi hija se pudra en la cárcel". Aunque aclaró: "Mi respeto a la comunidad musulmana".