Cuando se hizo cargo el pasado 17 de septiembre de La Tentación, un local cercano al teatro Víctor Jara y a dos centro comerciales de Vecindario, Raúl González sabía que se enfrentaba a una dura tarea por delante. La crisis económica y la mala fama que adquirió el establecimiento en su anterior etapa no asustaron, sin embargo, a este joven segoviano, de 31 años, y que lleva residiendo desde hace seis en la Isla.

"Cuando me interesé por el local me comentaron que antes era un lugar conflictivo, con mala reputación, y que para sacarlo adelante tendría que echarle muchas horas e imaginación para atraer a los clientes con el objetivo de luego conseguir su fidelización, y en ello estamos", afirma González, mientras no para de observar cómo se desarrolla la actividad en el local. Saluda a los clientes, anota la comanda, habla con sus seis empleados y se mueve por todas partes. Y así todos los días, con un horario que inicia a las siete de la mañana y acaba a las dos de la madrugada.

Considera que el esfuerzo realizado tiene su compensación porque el local va ganando adeptos y el negocio, pese a la crisis, empieza a ser rentable.

Sus originales propuestas, como el actual menú de tres euros, con dos platos, postre y bebida, u ofrecer dos bebidas nacionales al precio de una, como hizo hace varias semanas han calado en la cada vez más fiel clientela.

"Al principio venían entre ocho y 12 clientes, pero ahora sirvo unas 20 comidas diarias", añade, "para un público que es gente del barrio o que trabaja por aquí cerca, es un bar de gente obrera y trabajadora, un lugar para venir todos los días y encontrarse con un menú que sea bueno y barato".