La estación del tren en El Veril (Playa del Inglés)

será por su llamativo diseño un reclamo turístico más de este municipio, así lo afirmaron el vicepresidente del Cabildo de Gran Canaria, Román Rodríguez, la alcaldesa de San Bartolomé de Tirajana, Mari Pino Torres, y el arquitecto autor del proyecto José Antonio Sosa, que presentaron hoy en la Casa Condal la futura estación.

Esta infraestructura será una de las más destacadas de las once estaciones que conforman la primera línea de transporte guiado para la isla. Un edificio emblemático que será lo primero que vean los ciudadanos y los turistas cuando se acerquen a Playa del Inglés tanto desde la autopista como desde la carretera general.

Al igual que el resto de estaciones ha sido pensado para cumplir una función intermodal del transporte público de manera que además del tren albergue a guaguas y taxis. Asimismo dispondrá de 1.000 plazas de aparcamiento para fomentar que los ciudadanos dejen aquí su coche y cojan el tren para desplazarse al aeropuerto, la capital o los municipios del corredor.

El vicepresidente insular aseguró que el tren, combinado con guaguas y taxis, supondrá una mejora cualitativa del sistema de transporte público de manera que se incrementará el número de viajeros y con ello se reducirá el uso del vehículo particular y las emisiones de gases de efecto invernadero.

Además indicó también que generará tejido económico puesto que sólo en la fase de ejecución de la obra se crearán 5.000 puestos de trabajo directo durante cinco años y captará una inversión para la isla que tirará del resto de sectores.

EDIFICIO SINGULAR

La estación de tren de El Veril se sitúa en un punto muy próximo a la trama urbana y conectará subterráneamente la estación con el acceso a la playa por la zona del Centro Comercial Tropical. Su diseño es singular ya que es un gran prisma de vidrio rojizo alargado que en uno de sus extremos se eleva para acoger al viajero, mostrar las vistas de los barrancos de la zona y señalar la salida sin necesidad de indicaciones.

El acceso a la estación se abre en una gran plaza arbolada de 4.200 metros cuadrados. Se divide en dos plantas, en una encontramos una dársena de 65 metros para taxis y 60 metros de dársena para guaguas. En otra se encuentra el vestíbulo (2.100 metros cuadrados), locales comerciales (10.000 metros cuadrados), andenes (2.800 metros cuadrados) y la planta de aparcamiento (24.000 metros cuadrados).

El coste aproximado de la estación es de 22,5 millones de euros y el plazo de ejecución depende del inicio de las obras. En este sentido Román Rodríguez indicó que la intención del Cabildo es empezar la adjudicación de las obras en el segundo semestre de 2012 y añadió que la financiación está pendiente del convenio que tanto la institución insular grancanaria como el Cabildo de Tenerife firmarán antes de junio con el Ministerio de Fomento del Gobierno central para el pago de la ejecución de obra y de las expropiaciones.

También indicó que tanto el Cabildo de Gran Canaria como el de Tenerife, dado el recorte en los presupuestos de inversión en obra pública que ha realizado el Gobierno español, estudian la posibilidad de acudir, una vez firmado el convenio, al mercado de financiación privada para poder comenzar las obras en el tiempo estipulado de manera que el Ministerio de Fomento respondería posteriormente con el capital y los intereses acordados.