María Teresa Cabrera Ortega recibió anoche el nombramiento de cronista oficial de Valsequillo y se puso a la tarea de forma inmediata con la lectura de una reseña histórica del pueblo entre los siglos XV y XIX, desde la entrada de los conquistadores castellanos por el Barranco de Tecén hasta su plena independencia política y económica de Telde.

Arropada por centenares de vecinos y personas, María Teresa Cabrera, Matesa, recogió el testigo del recordado Jacinto Suárez Martel, primer cronista del municipio. Tras su fallecimiento hace diez años, el 22 de agosto de 2002, la plaza permanecía vacante, aunque ocupada de forma interina por Antonio González Padrón, el cronista de Telde. Al cumplirse los 210 años de la constitución de Valsequillo como municipio independiente, el Ayuntamiento aprobó su nombramiento, por unanimidad, el pasado 13 de septiembre. Presidenta de la Asociación de Patrimonio Cultural de Valsequillo, María Teresa Cabrera, conoce la historia y las tradiciones del pueblo desde niña, según recordó anoche. Al quedar huérfana de padre a los seis años, sus primeras fuentes del conocimiento fueron sus abuelos y sus tíos, que le inculcaron la afición por la etnografía, aunque aquella niña todavía no conocía lo que eso significaba.

Después tuvo como maestro al propio Jacinto Suárez Martel, al que acudía con una libreta para apuntar todo lo que él contaba. "Era un pozo de sabiduría", resaltó anoche en su primer discurso, en el que también tuvo palabras de agradecimiento para sus compañeros de la Asociación de Patrimonio Cultural, el Rancho de Ánimas, la Asociación Canaria de Amigos de Galdós y los museos Canario, Colón, Pérez Galdós y León y Castillo. "Son mi segunda casa", apuntó.

La nueva cronista agradeció la unanimidad en el nombramiento y se comprometió a realizar su trabajo con rigor e independencia política, algo que no es nuevo para ella pues ha colaborado con todas las corporaciones municipales de la etapa democrática. Por último, agradeció el apoyo del pueblo de Valsequillo, que anoche llenó el aforo del centro cultural, y pidió a los vecinos que sigan enriqueciendo su legado.

El alcalde, Francisco Atta, también recordó a Jacinto Suárez, del que dijo que era "la historia viva" de Valsequillo, y señaló que Matesa sabrá continuar su labor porque es una persona de "demostrada valía" en la difusión de la historia. "En ese trabajo no estará, todos vamos a ayudarle para conservar la memoria de nuestro pueblo", recalcó el regidor antes de entregarle la distinción. La Junta de Cronistas Oficiales también le otorgó una placa de bienvenida, entregada por Francisco Hernández Delgado.