Teror reorganiza el tráfico en el casco histórico para extender su red de calles comerciales hasta el puente del Pino y el Monasterio del Císter. El nuevo Plan director del Ayuntamiento concentrará en la calle Obispo Morán (la bajada del Auditorio) todo el tráfico de ida y vuelta con San Mateo y Valleseco para "no contaminar la zona centro", peatonaliza nuevas calles cerca de la Basílica del Pino, propone mejoras en la plaza de Sintes para darle una actividad más regular, y reubica las paradas de taxis. El proyecto comercial, cultural y paisajístico, que requiere una inversión mínima de millón de euros, contempla una serie de miradores y novedosas señalizaciones luminosas en el empedrado para guiar al visitante por las tiendas.

Cambios en la movilidad, cierre de calles para animar al paseo y mirar escaparates, y acciones de hagan más atractiva la estancia aprovechando los balcones naturales. El plan que proyecta la expansión de la zona comercial abierta de Teror se centrará en tres estrategias. Pero, por encima de todas, la más llamativa consiste en concentrar en la zona baja a los vehículos que van y llegan de San Mateo y Valleseco.

Los técnicos plantean reconvertir la calle Obispo Morán, que ahora es la salida bajo el Auditorio, en una vía de dos carriles con acera a ambos lados, para acoger coches en ambos sentidos. Para ello, se plantea un nuevo tramo viario por la zona baja de la nueva estación de guaguas, las oficinas municipales y el cementerio, por el colegio. Además, se instalarán dos paradas de taxis en el entorno de la plaza de Sintes.

La actual vía principal hacia las Medianías, Calle Nueva, cambiaría el sentido de la circulación, mientras el pequeño tramo de la calle Isaac Domínguez, en la cabecera de la calle Real (la entrada a la Basílica), se transformaría en semipeatonal, al igual que la calle Obispo Urquinaona, detrás de la Casa de la Cultura.

Los cambios persiguen expandiendo la zona comercial abierta hacia la zona alta, el convento del Císter y el Puente del Pino, donde también se han consolidado muchos negocios.

El Plan de la Zona Comercial Abierta sugiere recuperar el parque de Sintes, que se extiende desde los pies del Auditorio hasta el barranco, además de que en una serie de acciones en la plaza del mismo nombre, donde ahora se colocan los puesteros. "Hay que dinamizar este espacio libre que ahora solo funciona durante los mercadillos", señalan los redactores. En este lugar se piensa instalar zonas de juegos, de reposo, jardines, servicio wifi y la posibilidad de organizar obras de teatro. Además, se plantea regularizar los nuevos puestos de venta callejeros para que sean más homogéneos y estén más ordenados de cara al visitante, según el tipo de producto en venta.

El presupuesto para acometer este conjunto de intervenciones ronda los 900.000 euros, sin contar con la nueva carretera y la puesta en marcha del Parque de Sintes. De ellos, casi 600.000 euros corresponden a las cuatro fases de intervenciones de ámbito comercial, con la peatonalización de las calles Urquinaona y microplazas para diseñar un itinerario comercial; a lo que hay que sumar 189.000 euros de los miradores paisajísticos que irían en el entorno del Císter, zonas de sombras y de descanso para los peatones. Y una tercera dotación de ámbito cultural, según recoge el documento, basado en este caso en carteles informativos y las guías en el pavimento.

El objetivo es ofrecer un recorrido peatonal contemplativo, cultural y comercial, donde tienen cabida las visitantes a los centros de interés. De ahí que se incluyan piezas que podrían ser luminosas en el suelo para guiar a los paseantes.

El primer teniente alcalde y concejal de Promoción Económica, Gonzalo Rosario, anunció que en poco tiempo comenzarán las obras de la primera fase de la actuación comercial, cuyo coste asciende a 22.650 euros, con apoyo del Cabildo. Sin embargo, las grandes partidas deberán esperar más allá de 2014, ya que el director general de Comercio del Gobierno de Canarias, le comunicó durante una entrevista mantenida la semana pasada que no existe financiación hasta entonces. Esta semana hará lo propio con el Cabildo, para ver las posibles aportaciones para estos próximos años.