La Consejería de Agricultura del Gobierno de Canarias culpa a Madrid de la escasa vigilancia en puertos y aeropuertos, que propició la entrada de la nueva plaga del Caribe, Diaprepes abbreviatus, y que ha saltado ya a los cultivos, después de ser detectada en un jardín público de Moya. El director general, César Martín, asegura que ya se ha decidido la inmovilización de partidas de un vivero de Costa Ayala en Las Palmas de Gran Canaria, que se cree el origen de los actuales focos; y niega que existan desequilibrios en favor de Tenerife en la contratación de técnicos cualificadados.
La plaga del gorgojo desconocido hasta ahora en Europa se detectó hace un año en el parterre situado junto a la Casa de la Cultura, donde se logró poner las medidas oportunas con una malla antihierbas y venenos, que parece que han dado sus frutos. Sin embargo, como publicó ayer este periódico, el problema sigue latente en un vivero de Costa Ayala, en Las Palmas de Gran Canara, así como una finca agrícola colindante. Precisamente, en este lugar se ha cortado ya cerca de medio millar de cítricos, además de expandirse hasta los aguacateros. Algunos expertos achacaban esta situación a que no se ha seguido los mismos procedimientos, ya que se han usado plásticos que permiten el movimiento de estos insectos, además de otras medidas complementarias con los venenos. A esto se suma, dicen, la apatía de la empresa pública Gestión del Medio Rural de Canarias ,encargada de los trabajos.
El director general defiende que se han tomado todas las medidas en este último año, y que ya se han invertido hasta 80.000 euros, sin contar la indemnización que recibirá el empresario agrícola por cortar sus plantas. Y culpó al Gobierno de España de la escasa partida económica asignada al control de en los puertos y aeropuertos. Por este motivo, habían presentado enmiendas al proyecto de presupuesto para el próximo año.
César Martín señaló que ya se tomó la semana pasada la decisión de inmovilizar las partidas del vivero, que puede ser el origen de esta plaga, si bien hasta el viernes seguía abierto. El acuerdo se toma pese a que, desde un primer momento, se llegó a poner sobre la mesa hace un año está decisión para evitar su propagación, como ha sucedido. Pero se dio marcha atrás, por el coste que eso podía suponer.
El Gobierno reconoció que hace dos semanas se intensificaron los contactos con el Cabildo, para hacer un seguimiento de los trabajos que se venían realizando. Sin embargo, el alto cargo palmero negó que exista un desequilibrio en la Consejería de Agricultura en el personal asignado a Sanidad Vegetal. Aunque la plantilla casi se quintuplica, y que el jefe de este departamento de Las Palmas tiene su oficina en Tenerife, asegura que se debe a la imposibilidad de contratar a nuevo personal. Y como ejemplo de la preocupación que, afirma, existe con esta plaga, señala que otro técnico se ha sumado al seguimiento del caso.
El portavoz de la COAG, Rafael Hernández, insistió ayer en la importancia de actuar en la prevención, porque "todas las plagas han entrado por puertos y aeropuertos; y hay que prevenir el contrabado de material vegetal".
