Los cuatros canarios implicados por la justicia en el llamado caso Fitonovo que ayer prestaron declaración durante más de seis horas ante el juez de la Audiencia Nacional, José de la Mata, negaron formar parte de la red de corrupción desmantelada en torno a esa empresa de jardinería sevillana con ramificaciones en las Islas, así como haber entregado o recibido dinero o cualquier otra compensación a cambio de adjudicaciones por parte de las administraciones públicas canarias. Los cuatro permanecen imputados tras su declaración de ayer, pero el magistrado los mantiene en libertad sin que el fiscal, Daniel Campos, haya pedido medidas cautelares contra ellos.
Dos antiguos altos cargos canarios y dos representantes en las Islas de las empresas investigadas fueron los primeros en comparecer ante el titular del Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional, que se ha hecho cargo de esta causa tras el traspaso a primeros de septiembre por parte de Mercedes Alaya, titular del Juzgado de Instrucción número 6 de Sevilla.
Los dos funcionarios isleños implicados, que ayer declararon por primera vez ante el juez, son José María Maya Cáceres, que fue jefe de Carreteras del Gobierno de Canarias, y Ulises Pérez, funcionario en excedencia del Cabildo de Gran Canaria y coordinador del área de Obras Públicas en el momento de los hechos. Los directivos empresariales que también acudieron ayer a la sede de la Audiencia Nacional son Rubens Coba Falcón, gerente en las Islas de API Movilidad, y Gustavo Adolfo Gómez, representante de Elsamex.
Junto a ellos, también declaró el funcionario del Ayuntamiento de Sevilla Javier Isidro Gómez, que también negó su participación en los hechos investigados en la capital andaluza. Todos ellos sólo habían declarado hasta la fecha ante la UCO Guardia Civil tras sus respectivas detenciones o citaciones, siendo la de ayer su primera comparecencia ante el juez.
Desde primera hora de la mañana los cuatros implicados isleños, acompañados de sus respectivos abogados desfilaron ante el juez en un largo interrogatorio que duró hasta entrada la tarde y de la que salieron haciendo frente a los mismos cargos que se señala en el auto de imputación, según fuentes judiciales.
Ulises Pérez, el primero de los canarios en comparecer ayer ante el juez De la Mata, está señalado por el auto del magistrado como supuesto receptor de 10.381 euros de Fitonovo en compensación por facilitar la adjudicación y ejecución de determinados contratos públicos por parte de la corporación insular grancanaria. Pérez negó haber recibido dádivas por parte de Adolfo de la Torre, el apoderado en Canarias de la empresa de jardinería Fitonovo, situada en el centro de la trama en Sevilla y con ramificaciones en Canarias, según la instrucción judicial.
También negó su participación en los hechos y haber cobrado comisiones el segundo de los funcionarios canarios que prestó declaración ante el juez. Se trata de José María Maya, ex jefe de Carreteras del Gobierno de Canarias, a quien el fiscal acusa de haber recibido de la misma empresa más de 57.000 euros entre los años 2003 y 2011 "por su actuación en la adjudicación y/o ejecución de contratos públicos".
Por su parte, Rubens Coba Falcón, gerente en Canarias de la empresa de mantenimiento de carreteras API Movilidad, y Gustavo Adolfo Gómez, delegado de Elsamex, han negado igualmente haber intervenido en el pago de sobornos a cambio de adjudicaciones públicas.
