Armando Rivero lleva 30 años repartiendo suerte en pleno corazón turístico de San Bartolomé de Tirajana. El pasado lunes tuvo una corazonada: marcar en su terminal de venta de cupones de la ONCE el número de la matrícula del coche de uno de sus clientes habituales en Playa del Inglés. Su pálpito se saldó con dos boletos premiados con 70.000 euros.
En la rotonda de Barbados, ubicada en el cruce de la Avenida de Tirajana con Estados Unidos, visitantes y trabajadores del sector turístico tientan la suerte cada mañana de la mano de Rivero.
Esta semana a uno de sus clientes asiduos, "empleado de la zona y padre de dos niños aún en edad escolar", le alegró la vida con un pellizco de 70.000 euros.
"Yo ya sabía que le iba a tocar. Lo presentía. Por eso esperé a que él me llamara para confirmarlo. Y así fue", aseguró Armando ayer, emocionado tras comprobar que su intuición había dado resultado.
El agraciado disfruta de un ingreso cuando menos inesperado en su cuenta corriente por una inversión de apenas tres euros. "Me alegro porque sé que se trata de gente que lo necesita y, con solo haberle escuchado la voz de agradecimiento, me produce una enorme satisfacción", añadió el agente de la ONCE.
"No siempre", pero en numerosas ocasiones este vecino de Ingenio vende a sus asiduos un cupón cuya numeración coincide con la matrícula del cliente. "Lo único que hago es añadir un primer número a la placa del vehículo, de tal manera que el boleto acertante fue el 11.756 y la matrícula de su dueño el 1756", desveló el vendedor.
Para Rivero este golpe de suerte constituye un aliciente para seguir con su labor diaria, que en ocasiones tiene que desempeñar a una temperatura de "hasta 30 grados a la sombra". Rivero matizó, además, que en la zona turística en los últimos años se ha incrementado la venta de apuestas al Eurojackpot por "tratarse de un sorteo que los extranjeros juegan en su país de origen". Aunque también, en menor medida, el volumen diario de cupones convencionales tras repartir el pasado 30 de diciembre un gordo de 35.000 euros y en 2003 una tira valorada en 175.000.
