Los propietarios de las vallas publicitarias ilegales en las carreteras de Gran Canaria han ignorado los llamamientos del Cabildo para que las retiren de forma voluntaria y se enfrentan a una sanción por incumplir la normativa sobre seguridad vial. La eliminación forzosa de los carteles se iniciará en la autovía del Sur y concretamente en el municipio de Telde, donde aún existen 107 anuncios de publicidad.
El gobierno insular de Antonio Morales alcanzó ayer un acuerdo con la alcaldesa de Telde, Carmen Hernández, por el que el Cabildo asume el desmantelamiento de las vallas en aquellos casos en que el Ayuntamiento tenga dificultades económicas para hacerlo, aunque después se cargará el coste de la obra y la multa a los infractores. Los responsables son los propietarios del terreno, las agencias publicitarias que colocaron los paneles y las empresas que se anuncian en ellos.
El acuerdo con el Ayuntamiento de Telde, donde se concentra el 75% de las 149 vallas ilegales que se han detectado en el entorno de la autopista GC-1, es un nuevo paso del Cabildo para recuperar el paisaje de la Isla, que seguirá por el resto de los municipios del corredor del Sur y, en una segunda fase, por la autovía del Norte y las carreteras del interior, explicó Morales, quien precisó que se ha reservado una partida de entre 200.000 y 300.000 euros para eliminar los carteles que se encuentran en suelo teldense, un dinero que se reclamará después a los responsables de instalación.
Tras reconocer que las reiteradas advertencias del Cabildo no han tenido efecto, ya que ningún propietario las ha retirado, Morales calculó que "en un plazo de dos o tres meses, dependiendo de los procedimientos administrativos", se podrá despejar todo el horizonte de la autovía entre Las Palmas de Gran Canaria y San Bartolomé de Tirajana, la puerta de entrada a los cuatro millones de turistas que visitan la isla cada año.
Situación caótica
El Ayuntamiento capitalino, que ya tiene experiencia en la erradicación forzosa de la publicidad ilegal, también se ha comprometido a ayudar a Telde en los procedimientos administrativos. En ese tramo de la GC-1, según el presidente del Cabildo, se mantiene una situación caótica que ha impedido hasta ahora emprender los expedientes sancionadores y ejecutar la retirada de las vallas.
"No ha habido respuesta por parte de las empresas ni de los ciudadanos de manera aislada, porque ahí hay empresas legalizadas y empresas sin legalizar, es un auténtico caos lo que existe en ese espacio", apuntó Morales, quien adelantó que el Ayuntamiento de Telde "ya ha iniciado los expedientes sancionadores para muchas de esas empresas".
Tras el acuerdo con Telde, y en una segunda reunión celebrada en la Casa Palacio, el Observatorio del Paisaje de Gran Canaria acordó destinar una partida de 115.000 euros para redactar el Plan Director de Regeneración Paisajística de la GC-1, que estará terminado en el mes de marzo y recogerá todas las actuaciones a realizar en el corredor del Sur.
El Observatorio del Paisaje está integrado por las consejerías insulares de Medio Ambiente, Obras Públicas, Política Territorial y por el Consejo Insular de Aguas, así como por los ayuntamientos de San Bartolome de Tirajana, Santa Lucía, Agüimes, Ingenio, Telde y Las Palmas de Gran Canaria. También participan organizaciones ciudadanas como la Asociación de Amigos de los Árboles y el Paisaje (Adapa), cuyo portavoz, Rafael Molina Petit, se mostró "satisfecho" por los acuerdos de ayer y reclamó que las medidas coercitivas para la eliminación de las vallas ilegales se extiendan también a los invernaderos abandonados y a las escombreras.
El número de carteles publicitarios en el resto de la GC-1 es mucho menor que en Telde y, según Morales, los demás ayuntamientos no tendrán tantas dificultades para hacer cumplir las normas de seguridad vial del Estado y de la Comunidad Autónoma canaria. "La intención es actuar en un primer momento en la autopista del Sur y con la experiencia adquirida proseguir por la autovía del Norte y el centro y resto de la Isla", añadió.
Entre tanto, recalcó Morales, el Cabildo seguirá con la ejecución de acciones previstas, como la creación de miradores por parte de la Consejería de Política Territorial o las actuaciones del departamento de Obras Públicas a la altura de la antigua noria de Jinámar.
Palmerales
En el Plan Director se incluirán medidas para recuperar y conservar las palmeras plantadas en los márgenes de la autovía, así como el resto de las zonas ajardinadas. Según Morales, también se incidirá en la concienciación ciudadana, pues el respaldo de la sociedad será "clave e imprescindible" para erradicar las imágenes negativas.
Según los datos recopilados por el Cabildo y Adapa, Gran Canaria es la isla con mayor número de infracciones a las leyes que prohíben la instalación de vallas publicitarias en las carreteras y, probablemente, también encabeza el ranking nacional de agresiones al paisaje con ese tipo de instalaciones junto a las vías interurbanas.
Pese a que la normativa que impide esta propaganda está vigente desde el año 1988, reforzada después por la Ley de las Carreteras de Canarias de 1999, solo en la autopista GC-1 se han contabilizado 149 anuncios ilegales.
Frente a islas como Lanzarote, La Gomera o El Hierro, cuyos empresarios y ciudadanos han interiorizado la necesidad de proteger el paisaje y han erradicado las vallas desde hace décadas, en Gran Canaria, durante más de 25 años, las autoridades de las cuatro administraciones han dado una amnistía de facto a todas las vallas publicitarias sin ninguna justificación, denunció Molina Petit.
