El Pleno del Cabildo de Gran Canaria aprobó ayer por unanimidad una moción contra del transfuguismo y a favor de la decencia en la actividad política, centrada en los consejeros de Podemos María Nebot y Miguel Ángel Rodríguez, acusados de tránsfugas por la oposición tras incumplir la disciplina de su partido y continuar en el gobierno de Antonio Morales tras la ruptura del pacto tripartito. Ambos consideraron que no son tránsfugas y aseguraron que siguen perteneciendo a Podemos, pues ni siquiera se les ha abierto un expediente de expulsión.
La moción, presentada por el PP y Unidos, es similar a la que se aprobó, también por unanimidad, en enero de 2013. En aquella ocasión fue propuesta por NC y PSOE para denunciar los casos de Juan Domínguez y Antonio Hernández Lobo, que abandonaron el grupo de CC para integrarse en el PP y mantuvieron la mayoría del gobierno de José Miguel Bravo de Laguna. Con los papeles cambiados, y entre acusaciones mutuas de "cinismo", los grupos y los dos afectados debatieron durante hora y media sobre los aspectos jurídicos y políticos de la situación de Nebot y Rodríguez, sin llegar a un acuerdo sobre la definición de tránsfuga.
El portavoz del PP, Felipe Afonso El Jaber, evidenció la ruptura del pacto tripartito con la marcha de Podemos a la oposición y criticó que Nebot y Rodríguez antepusieran "la poltrona a la dignidad", por lo que reclamó al presidente Morales que los destituya lo antes posible de sus cargos. "Aunque traten de justificarlo con trampas y triquiñuelas jurídicas, todo el mundo en la calle sabe lo que es un tránsfuga", apuntó Afonso, quien afirmó que el Cabildo es la única institución de Canarias que ha incumplido en esta legislatura el pacto antitransfuguismo firmado por todos los partidos en 2008.
Bravo de Laguna, portavoz de Unidos, se centró en la parte jurídica y sostuvo que Morales incumple la nueva Ley de Cabildos, del año 2015, porque Nebot y Rodríguez ya estaban considerados como No Adscritos cuando fueron nombrados en las áreas que llevaba Juan Manuel Brito. El expresidente lamentó que NC y el PSOE recurrieran "como único argumento" a recordar lo que ocurrió en el anterior mandato e insistió que en los casos de Domínguez y Lobo no se incumplió la ley, que ahora es más restrictiva con los tránsfugas.
Miguel Montero, portavoz de Podemos, hizo una dura intervención contra Morales, al que tachó de "bronquista y rompepactos", y recalcó que sus dos excompañeros "no dejan de ser tránsfugas porque lo digan NC y PSOE". Tras cuestionar los informes del secretario, al igual que PP y Unidos, Montero criticó que Morales recurra a "artimañas jurídicas" para justificar el transfuguismo.
Ángel Víctor Torres, portavoz del PSOE, y Carmelo Ramírez, de NC, insistieron en que Nebot y Rodríguez "no son tránsfugas" porque ni siquiera han sido expulsados de Podemos y consideraron que pueden seguir en sus cargos porque no se han ido a otro partido ni han provocado cambios de gobierno.
Antes de la votación, el presidente Morales esgrimió un nuevo informe jurídico, encargado a Gerardo Pérez Sánchez, profesor de Derecho Constitucional, favorable a la continuidad de Nebot y Rodríguez, que al final pidieron la palabra para denunciar a los tránsfugas y asegurar que ellos no lo son.
