El grupo Seaside Hotels ha comenzado los trabajos de construcción de uno de los dos hoteles que va a levantar en Pasito Blanco. La cadena, que dirige el empresario alemán Theo Gerlach, está llevando a cabo el movimiento de tierras y de cimentación, actuaciones previas a la edificación del hotel de cinco estrellas, y está a la espera de que el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana le dé luz verde a las modificaciones del proyecto inicial , y del que cuenta con licencia urbanística desde el año1999 para empezar a hacer el hotel.
La empresa espera poder iniciar las obras del primer establecimiento de Pasito Blanco a partir de eptiembre. El edificio tendrá 550 habitaciones y se ubicará en las parcelas A y D del Sector 5 de Pasito Blanco que ocupan en conjunto unos 75.000 metros cuadrados.
El proyecto inicial lo realizó Jaraba Arquitectos, y se adaptó al planeamiento en vigor, pero Seaside decidió una década después modificar este diseño, y encargó a un equipo de arquitectos americanos, OBM, los retoques a la idea original así como el proyecto del otro hotel que va a levantar en esta zona, y que aún no dispone de licencia.
La inversión prevista entre ambos complejos se eleva a 180 millones de euro y han sido declarados de interés estratégico a comienzos de este año por el Gobierno canario. La cadena ha señalado que las obras de construcción darán empleo a unas 300 personas, y que se contratarán a 600 trabajadores para atender los dos hoteles.
Junto a este terreno donde los tractores y camiones están trabajan a todo ritmo estas últimas semanas, el promotor dispone de otras dos parcelas, las B y C, que suman otros 60.000 metros cuadrados, donde pretende construir otro hotel de menos plazas, en este caso de 170 habitaciones. Los dos alojamientos quedarán conectados a través de un vial y el promotor ya ha concluido las obras de urbanización de todo este suelo, que alcanza unos 160.000 metros cuadrados y a la que se llega desde el acceso a la zona de Pasito Bea.
El hotel de 550 habitaciones tendrá categoría de cinco estrellas, mientras que el de 170 será un cinco estrella gran lujo y estará dirigido a clientes más exigentes, como los que eligen el Gran Hotel Residencia, si bien fuentes de la empresa señalaron que será un alojamiento mucho "más moderno" y que dispondrá de "más espacio" que el tienen en Maspalomas.
Las mismas fuentes destacaron que los nuevos hoteles, con vistas a la costa de Pasito Blanco se han adaptado al desnivel del terreno, de tal forma, que el impacto visual de las alturas, siete plantas en el caso del que contará con 1.100 camas, y cuatro en el que tendrá 340 plazas se logra reducir bastante. Ni un detalle más se ha querido dar de los nuevos hoteles, y tampoco el nombre que les van a poner.
Eso sí, serán los primeros hoteles en levantarse en esta última década en este municipio, tras los del grupo Lopesan en Meloneras, ya que la última cadena que ha intentado construir un nuevo establecimiento es Riu, que tenía licencia en 2013 para derribar el Hotel Oasis y sustituir el edificio emblemático de los años setenta por otro, y no ha podido ejecutarla por el expediente del Bien de Interés Estratégico que tramitó el Cabildo de este entorno de Maspalomas.
El terreno de Pasito Blanco lo obtuvo Gerlach en 1989 a través de una permuta con el Gobierno canario y el Ayuntamiento por el derribo del Hotel Maspalomas. Fue primero la moratoria la que paraliza estos proyectos, y la empresa hasta denuncia al Gobierno pero pierde la batalla judicial. Más tarde la crisis dificulta la falta de financiación y obliga al grupo a posponer los proyectos de Pasito Blanco. Ahora, la cadena espera que obtener en breve el visto bueno al modificado de un proyecto y la licencia del otro para ampliar su oferta.
La comercialización del hotel de gran lujo se dirigirá a turistas de alto nivel adquisitivo, segmento poco explotado en Gran Canaria frente a la optimización impulsada en Tenerife, que le lleva a facturar mucho más, tanto por cuota de visitantes como por volumen de ingresos. Además, Seaside contará con los únicos dos hoteles de la máxima categoría de la Isla: el Residencia y el de Pasito Blanco.
El empresario alemán, que vino a Gran Canaria de visita, comenzó en el negocio turístico en los setenta, tras comprarle al conde de la Vega Grande tres parcelas en las que levantó tres hoteles: Don Gregory (San Agustín), Sandy Beach (Playa del Inglés) y Palm Beach (San Agustín). Hoy sigue con ellos, excepto con el de San Agustín, que lo vendió al grupo Dunas. Seaside es dueño de 10 hoteles: dos en Maspalomas (Residencia y Palm Beach), uno en Playa del Inglés (Sandy), otro en Lanzarote (Jameos), otro más en Valencia (Westin) y cinco urbanos en Alemania.
