La Villa de Moya vivió una emotiva e intensa noche de Jueves Santo con las procesiones de la Santísima Virgen de los Dolores y el Cristo de la Buena Muerte, en el que fue uno de los actos más destacados de la Semana Santa moyense y que reunió en las calles del casco a numerosos fieles hasta cerca de la medianoche.

Tras la celebración de la Cena del Señor y la Hora Santa, a las 21 horas partieron desde la iglesia de Nuestra Señora de Candelaria sendos pasos, cargados a hombros por costaleros y costaleras del municipo norteño, acompañados por la Agrupación Musical Cumbres y Costas de la Villa de Moya y la Agrupación Musical San Isidro Labrador, de Cardones, en Arucas. Con la particularidad, además, de que el trono del Cristo moyense es el único de Gran Canaria cargado desde hace 17 años exclusivamente por mujeres.

En total, 26 cargadoras con edades comprendidas entre los 17 y los 64 años, que desde horas antes de la procesión se preparaban para la gran cita, tras más de dos meses ensayando cinco horas a la semana. Con devoción y fe para elevar al ritmo de las diferentes marchas procesionales el trono con la imagen del Cristo de la Buena Muerte, obra del escultor catalán Sebastián Sanabria, que con el remate de plata cordobesa y los diferentes elementos decorativos alcanza los 900 kilos de peso. Cantidad que requiere de grandes dosis de fe y entrega por parte de las cargadoras, quienes un año más disfrutaron de la experiencia.

16 años bajo el trono

"A mí me compensa porque es una vivencia que necesito cada año para sentirme una mujer completa", reconoció Sara Moreno, quien tras 16 años debajo del trono se estrenó en esta ocasión como capataz. "Para nosotras es muy importante salir en Semana Santa y con el Cristo de la Buena Muerte y todas las que están o hayan estado ahí debajo con nosotras y tenga fe, no puede vivir sin esto", expresó Sara Moreno.

Si bien explicó la complejidad de cargar con un trono de estas dimensiones durante las casi dos horas que duró la procesión y que requiere "mucha compenetración entre ellas y que todas vayan igual, que conozcan los pasos de unas y otras y si una tiene el paso más corto tienen que amoldarse unas a otras".