El antiguo congelador de pescado del puerto pesquero de Naos será el futuro Museo del Mar y Centro de Investigación de Cetáceos tras el principio de acuerdo alcanzado por la Autoridad Portuaria de Las Palmas, propietaria del edificio, y el Cabildo de Lanzarote. El presidente de la Autoridad Portuaria de Las Palmas, Luis Ibarra, considera positiva la intención del Cabildo de crear este museo en las antiguas naves de comercialización de congelados que la empresa Frigorsa tenía en Arrecife durante su desplazamiento a la isla con el fin de conocer el proyecto.
Para el presidente del Cabildo, Pedro San Ginés, la creación de este museo en Puerto Naos saldaría "la deuda histórica que tienen esta isla, y más concretamente su capital, con el mar y sus orígenes marineros, amén de que se haría justicia con la condición que ostenta Lanzarote, junto a Fuerteventura, de ser uno de los lugares del planeta más importantes en cuanto a biodiversidad de cetáceos".
El proyecto del Museo del Mar fue uno de los presentados por el Cabildo de Lanzarote al Gobierno de Canarias como candidato a obtener financiación a través de los Fondos de Desarrollo de Canarias (FDCAN). En concreto se solicitó para el presente ejercicio de 2017 una partida de 80.000 euros para la elaboración del proyecto, cuya contratación está en curso.
La construcción de este museo supondrá previsiblemente la demolición de la mayor parte de las actuales instalaciones de Frigonsa para poder ajustarse al proyecto museístico. Por su parte, el vicepresidente primero de la Institución, José Juan Cruz, que también estuvo presente en el encuentro al igual que el vicepresidente segundo, Manuel Cabrera, y el representante del Ayuntamiento de Arrecife en la Autoridad Portuaria, Tomás Fajardo, señaló que con este proyecto "se pretende abrir Arrecife al mar y dar una oportunidad a la ciudad y a Lanzarote de contar con una alternativa más de ocio y con un punto de encuentro para los ciudadanos y visitantes".
Ibarra visitó también la antigua balandra que se ha depositado en Naos a la espera de poder iniciar su restauración. El Cabildo ha solicitado a la Autoridad Portuaria que proceda al rodamiento del muro de protección del Monumento a los Marineros del Cruz del Mar para colocar la balandra 'María del Rosario, en esa zona, mientras se inicia el proceso de restauración. El objetivo es que permanezca en la zona de exposición aunque todavía falta que el Cabildo materialice la compra por 2.000 euros a su actual propietario.
El último dueño de esta balandra fue el lanzaroteño Blas González que lo había adquirido para excursiones turísticas por el litoral de la isla. No obstante, la embarcación ha estado abandonada en los últimos años en el muelle pesquero presentando un estado de ruina casi total. Por las deudas contraídas con la Autoridad Portuaria por no pagar los atraques a punto estuvo de acabar en el desguace.La intervención en el último momento del Cabildo a petición de varios colectivos provocó que Puertos paralizase la destrucción de esta embarcación de cabotaje, previsiblemente de las últimas de sus características que quedan en Canarias.
Los colectivos, entre los que se encuentran las sociedades Democracia y Torrelavega y el Club Náutico pedían que la balandra fuera para el museo del mar.
