Las asociaciones de vecinos de la capital mostraron ayer su indignación ante el rechazo por parte del gobierno municipal a las alegaciones presentadas en contra de la operación del Canódromo, la prolongación de Mesa y López y la construcción de grandes torres, la retirada de la subestación de Unelco de la Cícer, la eliminación del Frontex en San José y del hotel en El Rincón, entre otras operaciones previstas por el Plan General que rechazan los ciudadanos.

Óscar Roque, presidente de El Real de Las Palmas , informó de que las tres federaciones ya impugnaron el plan en el Consejo Social y advirtió de que el gobierno municipal se ha saltado a la torera el trámite del dictamen del Plan General por ese órgano ciudadano, que "no se realizó por falta de quórum", antes de aprobar el documento en la sesión plenaria. Los vecinos criticaron también la negativa del gobierno a la posibilidad de participar en el pleno de mañana, como habían pedido los vecinos. "Ésta es la participación que defiende el PSOE", dijo Roque, que anunció una nueva lluvia de alegaciones al Plan General, que además llevarán a los tribunales. "No nos van a parar. La gente está muy indignada. Es mentira que el Ayuntamiento tenga que indemnizar a Realia por el Canódromo", sostuvo.