La Concejalía de Vivienda de la capital grancanaria no atenderá más peticiones de ayudas para pagar alquileres de vivienda en lo que queda de año, salvo que sean casos "inaplazables", porque no hay dinero para pagarlas y porque el servicio "no está dimensionado", según el departamento, para dar respuesta a más de 100 solicitudes mensuales. El pleno municipal, último antes de las vacaciones de los concejales, aprobó ayer una inyección de 300.000 euros, que se añadirán a la partida inicial de 400.000 que se creó este año para hacer frente a las ayudas económicas al alquiler, una cifra que ha sido insuficiente para hacer frente a las 563 peticiones recibidas.

Las solicitudes del primer semestre han sido tan numerosas, que el 2 de julio sólo quedaban disponibles 48.326 euros, por lo que ha sido necesario tirar del dinero sobrante del ejercicio pasado (remanentes) y aumentar la partida en 300.000 euros, que sólo servirán para hacer frente a las peticiones ya recibidas durante el primer semestre y situaciones urgentes que se produzcan a partir de ahora.

En total, Vivienda recibió entre enero y junio un total de 563 solicitudes, de las cuales se han resuelto de forma favorable 135 y 59 han sido rechazadas. El departamento calcula que de las 369 solicitudes que quedan por tramitar, habrá que atender a un total de 258 personas, lo que supondrá un desembolso de 309.600 euros. Las ayudas al alquiler consisten en el pago de 300 euros durante cuatro meses (1.200 euros).

El concejal del PP Ángel Sabroso criticó que no se atiendan más ayudas de aquí a final de año, porque "eso significará más chabolas en la ciudad".