Esta mañana (9.30) comienza una nueva edición del Fotosub Playa Viva en la playa de Las Canteras, una cita de tres días casi imprescindible para los submarinistas, profesionales y amateurs, que más que un premio buscan un rato de diversión y encuentro con los colegas del neopreno.

Aunque la competición se inicia hoy con el Cazafotosub -prueba en la que se debe fotografiar el mayor número posible de peces en tres horas-, hace ya varios días que los submarinistas se entrenan en las aguas interiores de Las Canteras. "No es lo mismo venir a ver lo que pillas de sopetón que ya conociendo dónde están las cuevitas y los recovecos donde se suelen meter los peces", reconoce Alejandro Montesdeoca, un buzo que participará en la prueba de hoy.

Ayer, Montesdeoca ponía a prueba su cámara forrada de una carcasa de plástico junto a otra compañera y rival a partir de hoy, Regina Malles, una submarinista con enorme experiencia en el avistamiento de cetáceos. "Hay que venir antes del día de la prueba porque así sabes en qué cuevita se esconden los peces estacionarios como los cabosos, las morenas y las carmelitas o ves las algas en las que se meten las fulas, las viejas o los gueldes", dice Malles. La submarinista participará también en la prueba estrella del fotosub del sábado, en la que posará como modelo subacuática. "Son fotos creativas y he entrenado incluso en piscinas".

Ambos submarinistas coinciden en que un buzo peninsular "que las pilla todas" es el gran rival a batir, por eso se preparan desde una semana antes. "Estos días hay marea llena y el agua está muy turbia, esperemos que mañana [hoy] la mar mejore", señala Malles. "Realmente este fotosub es una fiesta, aquí no venimos a ganar un premio, venimos a pasarlo bien y a encontrarnos con los compañeros submarinistas, somos todos amigos", recalca Montesdeoca.