La ceremonia religiosa será todo un acontecimiento en la Isla, ya que la última vez que se celebró dicho ritual fue hace 48 años cuando se coronó a Nuestra Señora de la Portería (1964), una de las imágenes que hasta este momento han recibido tal honor junto a la Virgen del Pino de Teror (1905) y Nuestra Señora del Rosario de Agüimes (1959). La fiesta es por partida doble ya que por primera vez una talla del mejor imaginero que ha dado Canarias -José Luján Pérez (1756-1815)- recibe la distinción.

La Real e Histórica Hermandad y Cofradía de Nazarenos del Santo Encuentro de Cristo -bajo cuya custodia está ahora la talla, aunque pertenece a Patrimonio Histórico- vive estos días con emoción el acontecimiento. No en vano el proceso ha sido largo ya que para que la imagen de la Virgen de los Dolores de Vegueta sea coronada el próximo 24 de mayo en la Catedral por el obispo de la Diócesis de Canarias se ha tenido que presentar a las autoridades eclesiásticas un expediente en el que se justifica su antigüedad, su advocación mariana y su calidad escultórica. El expediente fue presentado en noviembre de 2009 y fue avalado por diversas instituciones públicas, privadas y religiosas así como personalidades del mundo social, político y cultural isleño.

El 31 de marzo de 2010, la cofradía -constituida en 1997 y compuesta por 112 hermanos- recibió el decreto de la coronación, pero la hermandad ha querido esperar hasta ahora para preparar con tiempo los actos con el fin de que cualquier ciudadano creyente o no pueda participar de una fiesta en la que tradición, historia y cultura se entremezclan. El hermano mayor de la cofradía, Jesús Manuel León, sintetiza los 215 años de devoción isleña en una frase muy visual. "Esta imagen ha venido con nosotros desde que las calles de la capital eran de tierra, luego de callaos y de adoquines y, ahora, de asfalto". Nuestra Señora de los Dolores (1797), la única de candelero de paños encolados que existe de Luján, recibirá el 24 de mayo la corona y la daga con la misma austeridad que procesiona cada Miércoles y Viernes Santo. El valor de dichas piezas será donado a Cáritas por acuerdo de la cofradía.