La Policía Local traslada al potrero los coches accidentados para que sea el ciudadano el que pague el servicio de la grúa. Una Orden General de la Jefatura de la Policía Local del pasado 21 de abril manda a los agentes que envíen los vehículos averiados al depósito municipal cuando hasta ese día lo habitual era pedirle a la grúa que dejase el coche en una vía en la que no perturbase la circulación mientras llegaba la del seguro del accidentado. El servicio, de aquella manera, era costeado por el Ayuntamiento de la ciudad mientras que ahora es el ciudadano el que ha de cubrirlo. Los miembros de los sindicatos aseguran que detrás de este cambio se esconde "un afán recaudador".

El concejal de Movilidad y Medio Ambiente y Primer Teniente Alcalde, Ángel Sabroso, confirmó la aplicación de la medida denunciada por los sindicatos Comisiones Obreras (CC OO) y Unión General de Trabajadores (UGT) pero precisó que "no tiene sentido que el servicio de grúa para un vehículo averiado de un particular sea cargado en los presupuestos municipales como sí se hacía cuando vivíamos en tiempo de vacas gordas".

Sabroso, siguiendo la orden de la Jefatura de la Policía Local, recuerda que la retirada de los vehículos solo se efectúa cuando la avería se produce en una vía importante de la ciudad. "El dueño tiene la responsabilidad de llevarse el coche y, por norma general, se espera a que llegue la grúa del seguro, pero cuando esto ocurre en una arteria de la ciudad, la prioridad es liberar la vía para que no interrumpa la circulación y por eso se llama a la municipal".

Iván Jiménez, de Comisiones Obreras, asegura que detrás de la orden se esconde "un afán recaudatorio porque antes el pago del servicio de la grúa se cobraba de los presupuestos de la Policía Local mientras que ahora es el ciudadano al que se le ha averiado el coche el que tiene que pagar hasta 90 euros pese ha que está esperando que llegue su grúa".

Según defiende, el problema se encuentra en una interpretación "equivocada" del artículo 85 del Real Decreto 339/1990, de 2 de marzo, por el que se aprueba el Texto Articulado de la Ley Sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a motor y Seguridad Vial. En este se dice que si el responsable del vehículo "no" procediera a la retirada del vehículo, lo hará la "autoridad encargada de la gestión del tráfico" pero, por lo general, "el usuario se encuentra esperando su propia grúa para retirarlo, por lo que sí tiene intención de hacerlo".

En cualquier caso, Jiménez denuncia que además de darse este cambio en la política del uso de la grúa municipal, "el lunes se ordenó a cuatro policías de barrio -dos en el turno de mañana y dos en el turno de tarde- que se dedicasen a recorrer las calles desde Juan XXIII hacia el Cono Sur, por un lado, y hacia el Puerto, por otro, con la exigencia de que encontrasen al menos cuatro coches mal estacionados al día y avisasen a la grúa municipal".

Sabroso, por su parte, niega que se haya dado ninguna orden de este tipo. "Es rotundamente falso", contestó al ser preguntado sobre este punto. Jiménez, por su parte, no solo destaca el supuesto "afán recaudatorio del Ayuntamiento" sino que critica que esos policías de barrio "no estén haciendo el trabajo que deberían y se dediquen a buscar vehículos que mandar al depósito municipal".