Educación

Contra la obesidad infantil, buena cocina

El Ayuntamiento de la ciudad pone en marcha una estrategia dirigida a prevenir la obesidad infantil formando a las familias en los principios básicos de una nutrición equilibrada.

Más de 200 familias de las 11 escuelas municipales participan en talleres de comida saludable 

Taller de cocina saludable con Carolina Darias

La Provincia

José A. Neketan

José A. Neketan

Más de 200 familias de las 11 escuelas municipales de Educación Infantil participan en la primera edición de la iniciativa puesta en marcha por el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, con el objetivo de combatir la obesidad infantil a través de talleres de cocina saludable que acompañan consejos de profesionales de la dietética y nutrición.

Enmarcada en la estrategia Las Palmas de Gran Canaria más que bien, el proyecto cuenta con un equipo de nutricionistas y chefs especializados en alimentación infantil que enseñan a padres, madres o personas responsables de los menores a elaborar de forma fácil y amena una serie de recetas saludables. También muestran la importancia del consumo de alimentos de proximidad y de una alimentación equilibrada. 

La Escuela Infantil Princesa Tenesoya acogió este jueves uno de esos talleres, dedicado en esta ocasión a las cenas. Un grupo de medio centenar de padres y madres atendieron a las recomendaciones de la nutricionista Jennifer Sastre, quien insistía en la forma de combinar hidratos de carbono con proteínas en las diferentes comidas. Junto a estos consejos en la etapa de 0 a 3 años, destacó pequeñas acciones como implicarlos en la cocina para la elaboración de los platos, intentar cenar en familia y también que los menores vean a sus progenitores o responsables comer lo mismo que ellos.

Cocina fácil y nutritiva

Tras algo más de 10 minutos de teoría llegaba el momento de la práctica. En esta ocasión, el chef Himar Quintero propuso elaborar tortitas con brócoli, pastelitos de calabaza, queso y huevos o pollo marinado de manera fácil, usando en esta ocasión las freidoras de aire, que también pueden ser sustituidas por el horno tradicional. 

Los padres y madres también aprendieron a leer e interpretar las etiquetas de alimentos ultraprocesados

En menos de media hora ya estaba el resultado sobre la mesa para pasar a la degustación. La idea del cocinero era buena: presentar las verduras a los niños y niñas en un formato que fuese atractivo y a la vez fácil de elaborar por parte de sus cuidadores. 

Raúl y Betsaida aseguraron que estos talleres les han facilitado mucho la idea a la hora de hacer la comida a sus hijos, «además de tener más variedad de lo que les damos habitualmente». La pareja agradeció la forma de presentar las verduras «que le entran de otra forma a los niños».

Santiago también es un defensor de esta iniciativa. Aseguró que le ha servido para aprender a leer y entender las etiquetas de los productos alimentarios y a identificar el azúcar que se encuentra en los alimentos ultraprocesados y su relación con determinadas patologías. «También me ha servido para volver a la cocina en casa y hacer platos que hace tiempo que no hacía y que eran bastante sanos», destacó.

Álvaro subrayó que la asistencia a estos talleres le ha servido para guiar a los padres sobre nuevas recetas. Aunque confiesa que como cocinero «voy escapando», ya ha puesto en práctica algunas de las recetas, «que son sencillas y a veces nos complicamos a la hora de pensar qué le damos de comer a nuestros hijos». 

Desayuno, merienda y cena

Los talleres de cocina sana en familia, que se repiten el martes en la Escuela Infantil Pocahontas, ha estructurado el programa atendiendo también a los desayunos, como una de las ingestas más importantes y que debería cubrir al menos el 25% de las necesidades nutritivas del niño, y las meriendas, con clases prácticas sobre bocadillos o snacks saludables, con una amplia oferta de sabores, y la fruta. 

Además de incorporar en el programa el enseñar a las personas asistentes a descifrar las etiquetas de los productos alimenticios y procesados para distinguir los más sanos en la amplia oferta del mercado, los profesionales recomendaban lo que se conoce en inglés como Batch cooking, que no es más que organizarse para cocinar para toda la semana, ahorrando así tiempo, dinero y energía. 

La alcaldesa de Las Palmas de Gran Canaria, Carolina Darias, visitó el aula donde se estaba impartiendo el taller y no dudó un segundo en ponerse el delantal para participar en la elaboración de las recetas propuestas por el chef.

Acompañada por la concejala de la concejala de Educación y Cultura, Saturnina Santana, Darias recalcó que quiere «que Las Palmas de Gran Canaria sea una ciudad saludable. Con esta iniciativa contribuimos a que las familias de los niños y niñas de las escuelas municipales de 0 a 3 años aprendan a cocinar de manera sana y, además, de manera divertida, con recetas sencillas».

La alcaldesa señaló que con esta iniciativa «el Gobierno municipal busca prevenir la obesidad infantil y el sobrepeso, un problema de salud pública», que afecta especialmente a Canarias, donde un tercio de los niños y niñas tiene sobrepeso y un 18% padece obesidad y problemas de salud derivados de ella. 

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