La Autoridad Portuaria de Las Palmas ha sacado a concurso la obra de un contradique en la dársena de La Esinge, que se construirá en el Muelle Reina Sofía, para cerrar todo este espacio. El importe de la licitación del denominado Cierre Sur de La Esfinge es de 8,3 millones de euros. Éste es el último de los proyectos para abrigar la futura área de expansión del muelle, que, en conjunto, habrá costado más de 60 millones de euros.
El consejo de administración del Puerto aprobó ayer esta licitación, junto a la planeada por los técnicos de La Luz para corregir los fallos detectados en el rebautizado como dique Nelson Mandela. El importe de este contrato supera los 600.000 euros, según informó el presidente de la Autoridad Portuaria, Luis Ibarra.
Esta última actuación se ha catalogado como el acondicionamiento batimétrico de la segunda fase de la estructura, que ha sido objeto de una fuerte polémica en el Puerto. El Ministerio de Fomento detectó irregularidades en la ejecución de la obra y en los pagos realizados a cuenta de la misma, por lo que el expediente se encuentra hoy siendo analizado por la Fiscalía Provincia.
Tanto el presidente actual en el Puerto, Luis Ibarra, como su antecesor, Javier-Sanchez Simón, han denunciado las aludidas irregularidades, certificadas en un informe de Puertos del Estado que también estima posibles fallos en la seguridad del dique. La Autoridad Portuaria ha continuado en los últimos meses evaluando el estado de la barrera, y ya ha tramitado, con lo acordado en la sesión de ayer, la ejecución de trabajos para reparar el mismo.
En cuanto a la tercera fase, la que prolonga el muelle de 600 a mil metros, ésta se ha completado ya, por lo que pronto se podrá inciar la construcción de un primer contradique que partirá del propio dique. El segundo, el que ahora se saca a concurso, permitirá cerrar la dársena exterior del recinto portuario de la capital grancanaria.
Ibarra volvió a comentar ayer que todo este entorno será la futura área de expansión para sacar al mercado privado nuevas concesiones de espacios portuarios. En especial, los dedicados al sector de las reparaciones navales. Un mercado que ha crecido con las escalas de las plataformas petrolíferas en la Isla.
