Los nombres de las calles pueden ser un quebradero de cabeza para muchos, una manera de poner nombre a un punto de localización, y también pueden ser un homenaje a figuras importantes en la historia de la capital grancanaria. El IV Paseo Nocturno, que se celebró anoche en La Isleta, ha servido a los vecinos para "descubrir a los personajes que existen tras los nombres" de las calles, explica la vecina Isabel Montiel, que no se ha perdido un encuentro.
El cronista oficial de Las Palmas de Gran Canaria, Juan José Laforet, se encargó de ser el maestro de ceremonias de un encuentro que, como poco, ha servido a muchos para "re-aprender", indica Antonio Déniz, vecino y primerizo en el paseo nocturno. "Mucho ya lo sabía, pero con los años se te olvida" cuenta Déniz, e insiste en que "por eso está bien venir a estos encuentros".
Los canarios conocen quiénes son la princesa Guayarmina o Juan Rejón, pero pocos conocen su historia o porqué dan nombre a las calles de la capital grancanaria. De ello se encargaron anoche el párroco de Nuestra Señora de La Luz, Simón Pérez, el historiador y concejal de Participación Ciudadana, Sergio Millares, y Juan José Laforet, que también es el Romero Mayor de las Fiestas de La Naval.
El párroco se encargó de que los asistentes conocieran la figura del obispo Pérez Muñoz, "al que muchos confunden con el jugador de fútbol", bromeó, e insistió en que "pocos conocen la figura del obispo y lo que hizo por la capital grancanaria". Este es uno de los puntos en los que reiteró Laforet: "A veces en los nombres de las calles se honra demasiado a quien no lo merece y viceversa".
No era el caso de las calles por las que se pasearon los ponentes junto con unas 30 personas que llevan el nombre de personajes "que forman parte de la historia de Gran Canaria", narra Laforet. El Obispo Pérez Muñoz, Luján Pérez, La Naval, Juan Rejón y Princesa Guayarmina fueron las visitas históricas de este cuarto encuentro por los rincones de La Isleta.
Millares se encargó de revivir las historias de la princesa Guayarmina, que "encarnó la lucha entre dos mundos, el prehispánico y la cultura de los invasores castellanos", y Luján Pérez, "el gran escultor de la historia canaria".
Candida Curbelo acudió por primera vez para aprender la historia tras las placas de las calles. "Ya conocía a los personajes", admite Curbelo, pero expone que mucha de la juventud del barrio desconoce por completo quién era Juan Rejón o Pérez Muñoz. La mayoría de los asistentes al encuentro son personas mayores, "somos los que más interés mostramos por estos temas", afirma Montiel, que se lamenta de la poca participación por parte de los jóvenes. "Las fiestas de La Naval no son solo ocio, son cultura, y este evento sirve para mayores y jóvenes a conocer la cultura y la historia de su propio barrio", declara Montiel, que ha acudido a todas las ediciones de los paseos nocturnos y conoce la historia de muchos de los personajes que constituyen las calles de la capital grancanaria. "Sabía quiénes eran, pero los historiadores siempre te descubren nuevas historias", explica Montiel.
Laforet se encargó de relatar la historia de los nombres de las calles La Naval y Juan Rejón, conquistador que fue "accidentalmente" fundador de la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria cuando instaló su campamento provisional y que defendió la Isla de los ataques de los portugueses. Aprovechó la ocasión para recordar que "anteriormente la calle Juan Rejón era la vía que iba de la ciudad de Las Palmas al puerto, la que es hoy en día Pérez Muñoz", detalla Laforet e invita a los asistentes a hacer memoria y "recordar que antes se llamaba carretera y no calle".
"Tanto no ha pasado", dice Josefa Moreno, vecina nacida en La Isleta, que afirma que muchos siguen llamándola "carretera en vez de calle", en lo que Montiel está de acuerdo. Moreno es la primera vez que acude para conocer la historia detrás de los nombres de las placas. Lo hace con ilusión: "Es interesante saber quién es quién".
