Si se pregunta a quienes conocieron a Antonio Betancor León, hay dos calificativos que se repiten constantemente: "Luchador y bondadoso". Empresario ligado al sector del metal y las reparaciones navales en el Puerto de La Luz, a finales de los años 80 del pasado siglo dio el salto a la política y llegó a ser concejal en dos mandatos, con José Vicente León y Emilio Mayoral como alcaldes. Ayer falleció a los 84 años, dejando un recuerdo cariñoso entre sus familiares y amigos, que lo despedirán hoy, a las 11.00 horas, en el Tanatorio de San Miguel, para ser conducido al Cementerio del Puerto, donde se le dará el último adiós.

Vicente Marrero, compañero de Betancor en la Federación Provincial de la Pequeña y Mediana Empresa del Metal y las Nuevas Tecnologías (Femepa) y en la Asociación de Reparaciones Navales de Las Palmas, se mostraba ayer muy apenado por la noticia. "Ha sido un referente en el movimiento empresarial y en el Puerto, sobre todo en el ámbito de las reparaciones navales, pero también es una pérdida muy dura para mí, porque ha sido un espejo en el que fijarme... Siempre he intentado imitarle", reconocía ayer actual presidente de Femepa, que conoció a Betancor en 1987, en su taller familiar, que era una de las contratas más importantes de Astican.

De este hombre afable, fundador de la Federación del Metal en 1977, también destacan su capacidad de trabajo y la "eficiencia y valentía" con la que enfrentaba la tarea que tuviese entre manos. Marrero hacía ayer memoria y elegía un momento crucial en la historia de La Luz en el que su amigo tuvo un papel decisivo. "Había una competencia desleal de talleres clandestinos, sobre todo orientales, y él logró poner en orden y regular el asunto hablando con las administraciones públicas, que pusieron coto a aquella práctica ilegal. Eso fue un beneficio para todos", agregaba el actual presidente de Femepa, con un tono entristecido. "Era un buen profesional y muy buena persona... Le dedicaba tiempo a estar con sus amigos".

De su papel en el ámbito empresarial también hablaba el secretario de Femepa, Juan Carlos Betancor, que recordó que "fue uno de los grandes artífices de la paz social" de la que ha disfrutado el sector de las reparaciones navales desde las grandes huelgas que se sucedieron en 1977.

Pero aunque conocía ese mundo desde pequeño, quiso pasar a la vida pública y ejerció como concejal de Las Palmas de Gran Canaria durante dos mandatos, entre 1987 y 1990, con José Vicente León (CDS) como alcalde; y entre 1991 y 1995 con Emilio Mayoral (PSOE) al frente del Consistorio, durante el llamado time sharing que acordaron CDS, Alianza Popular (actual PP) e ICAN, y que, tras múltiples vicisitudes, terminó con el socialista en la Alcaldía. Betancor León militó en las filas de los populares y llevó distintas áreas de Gobierno como Tráfico o Policía. Sin embargo, destaca su labor en la organización del Carnaval de los años 1988, 1989 y 1990.

José Vicente León definía ayer al que fuera edil bajo su mandato como "una persona resolutiva. Se notaba que había sido directivo de empresa, porque afrontaba los problemas en el momento y no dejaba las cosas para después... Además tenía talento y talante, lo que es muy importante para la buena gestión", concluía León.

"Era un hombre encantador, dialogante, de los que practicaban la antigua política, la cercanía al ciudadano. Era un enamorado de dar servicio a los demás y transmitía un optimismo contagioso... Era muy buen compañero", señalaba ayer compungido Antonio Lorenzo, que coincidió con Betancor León en aquellos años convulsos de la política municipal. "Era una bellísima persona".