Las obras de la IV Fase de la Circunvalación, en el tramo comprendido entre el enlace de Las Mesas y Arucas, han recibido dos nuevos impulsos tras el acuerdo alcanzado con una de las propiedades objeto de expropiación, una explotación ganadera ubicada en las cercanías de la GC-20, y con la supresión de un cable de alta tensión que ha propiciado también el avance en el desmonte de la conocida como trinchera de Lomo Grande, puntos en los que ahora se han redoblado los trabajos. Justo en este lugar se encuentra el último obstáculo para culminar esta obra, se trata de una vivienda que por su proximidad al talud se ha considerado proceder a su expropiación.

En la actualidad, la Consejería de Obras Públicas y Transportes del Gobierno de Canarias se encuentra en pleno proceso de negociación con los propietarios del inmueble. Desde el momento en el que se alcance un acuerdo, los técnicos calculan que la obra estará finalizada en dos meses.

La trinchera de Lomo Grande centra en estos días la mayor actividad de trabajo en la obra, ya que las máquinas han iniciado al desmonte de una parte tras la supresión de un cable de alta tensión que sobrevolaba de un lado a otro el tronco de la vía. El movimiento de tierras que calculan los responsables de la obra es de unos 30.000 metros cúbicos de piedras y tierra. En la zona en la que se ubica la explotación ganadera, se ha procedido ya a trabajar en una parte de la finca -de común acuerdo-, para facilitar el proceso de reubicación y traslado del negocio. Las obras se han centrado entre la conexión con la autovía GC-3 de Circunvalación a Las Palmas de Gran Canaria y la conexión provisional a ejecutar en la carretera de acceso a Arucas en la GC-20, un total de 4,5 kilómetros de los 6,8 que abarca la IV Fase, por lo que sólo quedarían pendientes unos dos kilómetros.