La parcela del muelle de La Esfinge del Puerto de La Luz donde se planeaba instalar la planta de biomasa de la firma Ence (Energía y Celulosa) vuelve a estar disponible para su solicitud por parte de otra empresa. Así lo confirmó el presidente de la Autoridad Portuaria de Las Palmas, Luis Ibarra: "En el último consejo de administración llegamos a un acuerdo, incautamos una pequeña parte del aval y ahora está libre de nuevo", explicó.
Ibarra también aseguró que, de momento, ninguna compañía se ha interesado por este solar de 48.000 metros cuadrados donde se planeaba establecer el polémico complejo industrial que finalmente no se llevó a cabo.
El pasado mes de abril, la propia Ence presentó por escrito una renuncia en la que especificaba que se daba de baja en la solicitud de esta parcela, tras los dos informes desfavorables emitidos por Sanidad en los que se hablaba acerca de los efectos nocivos que podría tener la central sobre el medio ambiente y la salud.
Así, la instalación de la incineradora en el interior del recinto portuario quedó descartada. Tal y como el presidente de la Autoridad Portuaria expuso en su momento, este "era el camino lógico a seguir una vez analizados los informes del Gobierno de Canarias". "Era obvio que la Autoridad Portuaria no iba a dar la concesión", añadió entonces Ibarra.
A mediados de enero, tras el anuncio por parte del Gobierno autónomo de que no autorizaría el proyecto después de conocerse los dos informes negativos mencionados, la empresa Ence, que lamentó la decisión adoptada, comunicó que iniciaría la tramitación de una ubicación alternativa donde establecer su planta de biomasa.
En los informes desfavorables emitidos por Sanidad se detallaba que la central emitiría gases con efectos nocivos sobre la calidad del aire. Además, señalaba que el principal motivo para calificarla de desaconsejable era la proximidad con la población de Las Palmas de Gran Canaria.
Asimismo, se determinó que la actividad de la planta conllevaría un incremento en la exposición de los habitantes de la ciudad a partículas dañinas para la salud, que se agravaba por las condiciones meteorológicas predominantes en Canarias, con vientos alisios del noroeste que las enviarían desde el Puerto hasta la capital grancanaria.
Desde Sanidad también se destacó en su momento que la central emitiría contaminantes más peligrosos que el gas natural o el gasoil. Una afirmación que, sin embargo, fue rechazada por Ence, que recalcó varias veces que este tipo de energía es más limpia.
