La comunidad italiana de Gran Canaria, encabezada por el cónsul del país transalpino, Juan Carlos de Blasio, celebró ayer una Eucaristía, oficiada por el obispo Francisco Cases, en recuerdo de las víctimas del terremoto que sacudió Italia. El seísmo, que alcanzó magnitud 6,2 en la Escala de Richter, devastó varias localidades del centro de la nación y se cobró 231 vidas. Por este motivo, sus compatriotas en la Isla, así como aquellos que quisieron rendir homenaje a los fallecidos, acudieron a la misa en la Catedral de Santa Ana, en la foto.