"¡Por fin han quitado las cucarachas asesinas!", celebra Pepi González, presidenta de la Asociación de Vecinos de Guanarteme, tras la retirada de los separadores negros que hasta hace una semana flanqueaban el carril bici en la calle Secretario Padilla que tantos disgustos les han dado al vecindario. Y es que el color que tenían tan similar al de la calzada ha provocado que muchos residentes de la zona fuesen a parar directos al suelo, "sobre todo las personas mayores". De ahí que en esta transitada vía no oculten su alegría por la medida tomada por el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria que sustituirá los molestos bolardos por unos hitos de plástico azules mucho más visibles, como así anunció el director general de Movilidad, Heriberto Dávila.

Desde el Bazar Bagatela Miguel Marrero ve perfectamente desde su mostrador cómo los operarios municipales se afanan en quitar los que son los últimos separadores de la calle. "Todo lo que sea en ganar en seguridad es mucho mejor", comente en alusión a los nuevos pivotes que estarán presentes en varios tramos de la calzada. "Aquí pusieron reflectantes, pero la gente se sigue cayendo por eso me parece bien en que los quiten", asegura quien ha visto irse de bruces contra el suelo en varias ocasiones a la misma vecina.

Hace poco, un domingo por la tarde, Juan Manuel Rodríguez Rodríguez tuvo que salir corriendo de su establecimiento para socorrer a una señora de avanzada edad que se reventó el labio después de toparse con uno de los "gusanos", como él llama a los delimitadores. "No es la primera vez que esto ocurre, yo mismo me he tropezado alguna vez, pero el problema está en que no se denuncia", comenta el propietario del Asadero El Pollo Pérez. Por eso ve positivo el cambio de los bolardos por unos elementos más visibles, si bien de lo que verdaderamente está a favor es de que quiten el carril bici. "Es una calle demasiado estrecha y para los pocos ciclistas que pasan... Y encima hacen lo que les da la gana y al final tienen problemas con los conductores que dicen que no van en el sentido correcto", asevera.

Lo mismo opina Juan Castellano, quien regenta junto a su mujer el Bazar La Cícer desde hace una década. Desde su punto de vista el cambio de "las cucarachas" por los hitos de plástico azul "es un gasto de dinero innecesario". Y es que para él el carril bici es "un auténtico peligro, sobre todo por el doble sentido". Un hecho que Mónica Palacios, de Las Palmas en Bici, corrobora. "Cuando lo pusieron no lo vimos una buena idea. El principal problema es que esta vía no cumple con las medidas mínimas aconsejadas por la normativa y a eso hay que sumarle que se instalaron los separadores. Nosotros ya lo hemos dicho en la Mesa de la Bicicleta", señaló.

Sobre el tamaño de la vía también se pronuncia María del Carmen Poquet Moreno tras el mostrador del Bazar Vigo, ubicado en la citada vía, justo donde hace esquina con Gravina. "El carril bici es estrecho y los conductores están confundidos porque a nadie le termina de quedar claro cuál es el sentido correcto por el que deberían ir las bicicletas y creo que sería bueno que se informe sobre eso para evitar problemas", comenta quien en lo que respecta al cambio de los bolardos está muy satisfecha.

"Que hayan quitado los separadores me llena de alegría porque desde que los pusieron he visto caerse a nueve personas y algunas de ellas se han dado golpes muy fuertes, de hecho, la madre de una vecina se rompió una costilla", recuerda dentro de la tienda donde esos mismos damnificados aguardaban a la llegada de policías y ambulancia. "Yo misma me he tropezado varias veces, pero lo cierto es que las personas mayores son las que salen peor paradas".

Por este motivo la concejalía de Movilidad ha decidido intervenir en la calle Secretario Padilla. "Los separadores zebra que pusimos en la zona existen en otras ciudades españolas y pensábamos que los accidentes ocurrían porque había falta de costumbre entre los vecinos de este tipo de dispositivos, pero lo cierto es que con el tiempo no han desaparecido y por eso hemos decidido quitarlos", explicó Dávila. De manera que los bolardos han sido sustituidos por hitos de plástico azules que se repartirán por tramos a lo largo de la única vía en la que habrá cambios. "En Fernando Guanarteme y Diderot se van a mantener los separadores negros y los que se han quitado de Secretario Padilla se repodrán en otras calles donde sí se puedan usar", comentó el director general de Movilidad.