El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria y el Colegio Oficial de Veterinarios de Las Palmas han puesto en marcha la campaña No somos un juguete para promover entre la población la adquisición responsable de mascotas, sobre todo en fechas como la Navidad, en la que muchas personas deciden regalar animales a familiares o conocidos.

Por eso, explica la concejala del Área de Gobierno de Fomento, Servicios Públicos y Carnaval, Inmaculada Medina, con esta iniciativa se pone el acento en que las mascotas no son un juguete que se pueda abandonar cuando se pierda interés en la nueva adquisición, sino que implica una responsabilidad permanente y continua. "Queremos concienciar sobre la adquisición responsable de mascotas, porque los animales no son un juguete para comprar hoy y abandonar mañana", apunta Medina, que señala que también es importante promocionar la adopción frente a la compra.

Con esta campaña, que recuerda que "aunque lo parezca, no somos un juguete. Adquiere con responsabilidad", el área municipal de Salud Pública y el Colegio de Veterinarios van a difundir el mensaje a través de los distintos canales de comunicación y entregar cerca de 6.000 postales con recomendaciones para cuidar de las mascotas. Estas postales se van a distribuir en las Oficinas Municipales, Oficinas de Información Turística o clínicas veterinarias. También se va a recordar este mensaje en las calles de toda la ciudad.

En Las Palmas de Gran Canaria hay censados en la actualidad casi 70.000 perros y gatos, sobre todo perros, que son 65.000. Este año, se han tenido que recoger un total de 978 animales, sobre todo perros, aunque también 222 gatos y 12 gallinas.

La buena noticia, señala la concejala, es que con respecto a 2016 ha habido un descenso en la recogida del 20%. "Aun así, los abandonos siguen siendo demasiados y vemos que se siguen produciendo en mayor medida en fechas próximas a las vacaciones, como junio, julio y agosto". Otro dato interesante, señala, es el que muestra que el abandono de perros sin microchip es tres veces superior al de perros con microchip.

Según datos de la Fundación Affinity, las principales causas de abandono son factores económicos, camadas indeseadas, comportamiento del animal y pérdida del interés por parte de los propietarios. El perfil mayoritario del perro abandonado es de adulto, sano, sin raza específica, le siguen gatos adultos, sanos también mestizos.

Un dato que demuestra la importancia de campañas como la que ahora se inicia es el que señala que en un 40% de los casos, estos perros y gatos abandonados son regalos. Otro 20% procede de compras. "Por eso, también es importante fomentar la adopción frente a la compra", insiste Medina.

El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria trabaja precisamente en estos momentos en la nueva Ordenanza Municipal sobre Protección y Tenencia de Animales que incluye las nuevas exigencias legales para el mantenimiento y cuidado de las mascotas en el término municipal, incluyendo medidas que refuerzan la protección y las sanciones por maltrato o abandono de los animales de compañía.

Entre otros aspectos, se regula la compraventa de animales, con el fin de concienciar y responsabilizar de la compra de un animal, informando de sus necesidades y de las obligaciones que comporta su tenencia; o la compra a través de anuncios, internet, redes o similares para evitar el comercio fraudulento y el abuso de personas no autorizadas.

La ordenanza actualmente en vigor prohíbe la venta de animales de compañía fuera de los establecimientos autorizados, eso incluye mercadillos, vías públicas, plazas o cualquier forma de venta ambulante. Únicamente se pueden vender en los centros autorizados para tal fin, que cumplen con todos los requisitos administrativos y sanitarios para ello.

De hecho, el pasado fin de semana una patrulla de la Policía Local de Las Palmas de Gran Canaria se desplazó hasta las ramblas de Mesa y López al recibirse una denuncia anónima en la que se informaba que una persona vendía cachorros de perro en la vía pública. Quienes incumplan esta norma se enfrentan a multas de 150 euros, sanciones que se verán incrementadas cuando entre en vigor la nueva ordenanza.