La OPE de 2007 del Servicio Canario de la Salud (SCS) ha estado cargada de protestas, impugnaciones y denuncias. La última polémica es la relacionada con el examen de auxiliar administrativo que varios sindicatos estudian impugnar por "su extrema dificultad" y porque "las preguntas no se ajustan al temario". Sin embargo, la Consejería de Sanidad sostiene que en conjunto el examen tenía "una complejidad normal".
Más sonadas fueron las protestas, concentraciones, manifestaciones y acampadas junto a hospitales de los integrantes de la plataforma Por una OPE más justa. La plataforma agrupa a los interinos del SCS, especialmente enfermeros, que consideran injustas las bases de la oposición que establecen que la nota del examen prima sobre la experiencia y la formación profesional.
Además, los trabajadores reclaman que se desvincule la lista de contratación y el cese de la nota de la oposición. Esto es así desde el año 2010, cuando el Gobierno de Canarias publicó un decreto por el que la bolsa de empleo (listado de donde van llamando para las interinidades y sustituciones) se ordene a raíz de la nota final de la oposición. Una situación que también afecta a Educación.
Pese a las protestas, el examen de enfermería se celebró el pasado 31 de enero en los mismos términos en los que fue publicada la convocatoria. Finalmente la prueba, en principio, según los aspirantes, fue relativamente sencilla, por lo que se cree que al final Sanidad apostó por favorecer en cierta manera a los interinos, aunque no se sabrá con seguridad hasta que se publique la lista de aprobados.
En el punto opuesto se sitúa los exámenes de auxiliar de enfermería y auxiliar administrativo, cuyos opositores se quejaron de la gran dificultad. En el caso de la prueba de auxiliar de enfermería, celebrada el pasado 6 de junio, los datos hablan por sí mismos, sólo el 31% de los examinados aprobaron, o lo que es lo mismo un total de 3.925 personas aprobaron de las 12.356 presentadas, con 913 plazas ofertadas. El Sindicato de Enfermería Satse asegura que el examen fue una "criba" con preguntas correspondientes a otras categorías y fuera del temario, lo que califica como "ERE encubierto".
El examen de auxiliar administrativo ha sido duramente criticado, sobre todo, por parte del personal interino que se presentaba para estabilizar su puesto de trabajo. "El contenido de las preguntas no tiene nada que ver con las funciones que realizan diariamente y estaban redactadas con malicia, buscando el error del opositor", denuncia Octavio Sánchez, de Asamblea Siete Islas.
Sin embargo, el director general de Recursos Humanos del SCS, Carlos González Segura, niega que el examen tuviera una especial dificultad. "No es un examen regalado porque tampoco debe serlo. Tiene un cierto grado de dificultad, pero la intención es que fuera normal, que no fuera para un técnico superior, sino acorde al nivel que se le debe exigir a un auxiliar administrativo", subraya.
