El agente de la Guardia Civil, J. P. P., de 54 años falleció ayer, sobre las 19.40 hora canaria, al ser atropellado por un vehículo en el que viajaban dos personas mientras tomaba parte en un control de tráfico en la N-240, en el municipio oscense de Barbastro. Los dos ocupantes del coche trataron de huir, pero fueron detenidos. Al agente sólo le faltaban apenas tres meses para pasar a la reserva.