Nació como una norma para evitar retrasos burocráticos e incluso para reanimar el sector de las pequeñas obras en el municipio, pero esos deseos solo han quedado plasmados en el papel oficial y timbrado que le dio su aprobación. Se trata de la ordenanza municipal sobre tramitación de licencias de obra menor por acto comunicado, publicada en el Boletín Oficial de la Provincia del 28 de octubre.
Ahora, con la tramitación ayer por la Junta de Gobierno Local de la modificación de la ordenanza fiscal número 10, que supone la eliminación del pago de fianza para iniciar una obra menor que no invada espacio público -la cuantía mínima era de 450 euros- se espera que la ciudadanía se anime a usarla y no quede en saco roto los efectos positivos que se prentenden con ella. El cambio de la ordenanza fiscal número 10, según explicó Celeste López, concejala de Economía y Hacienda, "supone su adecuación a la ordenanza de licencias de obra menor por acto comunicado, ya que entraba en contradicción con esta última". Este cambio podría aprobarse en el próximo pleno de diciembre.
Juan Francisco Artiles, concejal de Urbanismo y Patrimonio del Ayuntamiento de Telde, considera que "es una pena que los ciudadanos no conozcan esta ordenanza, ya que supone un importante avance para que se puedan realizar trabajos en los inmuebles sin tener que esperar a que se les conceda la licencia. Esto ha parado mucho la iniciativa del vecino a la hora de hacer obras menores al ver cómo se retrasaba su proyecto".
La normativa, iniciada en el anterior mandato por el exedil de Urbanismo Pablo Rodríguez, contó con alegaciones precisamente de su sustituto en el cargo, Juan Francisco Artiles, que en la oposición presentó varias enmiendas "que se incluyeron en el documento final".
El titular de Urbanismo recuerda que "la licencia que se contempla en la ordenanza constituye un acto reglado que tras previa comprobación de los requisitos establecidos en la misma, se autoriza al solicitante a la realización de las obras que tienen la consideración de obras menores".
El Ayuntamiento incluye en la ordenanza aprobada un formulari tipo para que los vecinos informen sobre los trabajos que pretenden hacer, que deben ceñirse a lo que se considera obra menor como adecuación de locales, reparación de tejas, instalación de placas solares, pintura de fachadas o colocación de rótulos, entre otros. Tras la presentación de la solicitud en el Registro municipal, en 20 días pueden comenzar las obras, que luego serán revisadas por los técnicos municipales a su finalización.
"Con este formulario tipo que debe rellenar el ciudadano y con la aportación de la documentación necesaria", añade Artiles, "se evita, como contempla la legislación europea, las trabas burocráticas en las gestiones sencillas".
