El grupo de gobierno aprobará en el próximo pleno acogerse al proyecto Abaco (Aguas de Baño Costeras) del programa europeo Interreg, que promueve la mejora de la calidad del litoral de los archipiélagos macaronésicos de Azores, Madeira y Canarias. De hecho, entre los fines de Abaco se encuentran exportar las iniciativas y conocimientos en la gestión de costas para favorecer su expansión a otros lugares. Pero vistas las críticas de los usuarios, parece que las playas necesitan su particular Operación Bikini para mejorar su imagen.
Ya con el inicio de la primavera, donde las temperaturas animan a darse los primeros margullos, -en la costa teldense ya se pudo ver tímidamente en Semana Santa- la situación descrita por usuarios de Melenara, Hoya del Pozo o La Garita no es nueva, sino que desde hace varios meses vienen observando que los problemas continúan ahí, sin que se haya procedido a su solución, cuando ésta, alegan, no supondría un mayor problema para los responsables del área. Así, señalan que la zona de paseo entre La Garita a la playa de Hoya del Pozo y los riscos cercanos llevan desde noviembre siendo un peligro diario para quienes transitan por este paseo, ya que la cantidad de gravilla existente hace que los usuarios resbalen o deban sortear rocas de gran tamaño en el camino.
Pero la preocupación mayor es la de la seguridad, sobre todo con la rotura de una moto acuática que hace su servicio en la costa, pero que lleva tres meses en el dique seco. Su papel es primordial porque acorta el tiempo para labores de socorrismo y también deja sin un medio básico al personal de Playas.
No quedan las quejas aquí, aunque son de otra índole y en otra emblemática parte del litoral de Telde: la playa de Melenara. Aquí, las denuncias se dirigen a la pésima imagen que dan las pintadas realizadas y que permanecen desde hace más de un mes en la escalinata de acceso a Lomo Taliarte. "Machangadas, no arte urbano, es lo que han pintado ahí y en algunos riscos", asegura un residente.
