El consejo rector del Patronato de Turismo de Fuerteventura acordó ayer conceder su máximo reconocimiento, el premio Playas de Oro al Robinson Club, dentro de la convocatoria anual del certamen Distinguidos del Turismo de Fuerteventura. Durante también se acordó conceder el premio Playas de Plata a Playitas Resort, la Mención Honorífica Distinguido del Turismo a Lavandería Morales y la Mención Especial a Colectivos a la Asociación de Turismo Rural de Fuerteventura.

El presidente, Mario Cabrera, el vicepresidente del Patronato de Turismo, Blas Acosta, expresaron su felicitación a los galardonados y el agradecimiento a todas las candidaturas presentadas . La fecha de entrega de los premios se concretará próximamente tras el verano.

Hay que destacar que el Robinson Club está relacionado desde hace más de 40 años con Fuerteventura con dos establecimientos en el municipio de Pájara (Jandía Playa y Esquinzo Playa) que a lo largo de este tiempo han acogido a más de 700.000 clientes en torno a un modelo de club vacacional para familias. Su origen está relacionado con la apuesta que la familia de Catalina Rivero, Andrés García y Rolf Bruns hicieron en 1965 por Fuerteventura al invertir en la edificación del Hotel Jandía Playa, que se concluyó en 1968. Desde los años 70 contaron con el apoyo de TUI, que confió en el proyecto y creó el concepto Robinson.

Por su parte, el deporte y las vacaciones activas y en familia son los pilares de Playitas Resort (Tuineje) que con complementa sus tres establecimientos (Playitas Hotel, 223 habitaciones; Playitas Apartotel, 96 apartamentos y 114 estudios; y Playitas Villas, 24 villas), con unas instalaciones deportivas de primer nivel internacional, que le han llevado a ser elegido como centro de preparación para el equipo olímpico sueco para las Olimpiadas de Río de Janeiro 2016.

El origen de la Lavandería Morales es el de una empresa familiar que nace en los años 60 con el matrimonio Claudio Morales Benítez y Nina Martín Hernández. Desde el comienzo estuvo siempre relacionada a la actividad turística, prestando sus servicios a algunos de los primeros establecimientos turísticos que se abrieron en la Maxorata. Un negocio con una ejemplar trayectoria laboral que en la actualidad emplea a 98 personas.

A su vez, la Asociación de Turismo Rural de la Isla se creó en el año 2.000 y marcó un hito en la historia del sector majorero al apostar por el cuidado del medio ambiente y la restauración del patrimonio histórico. Una veintena de establecimientos que son un referente en la difusión de la cultura tradicional.