Herrera mantiene a sus hombres. En un ejercicio de fidelidad con sus escuderos, el entrenador de la UD Las Palmas facilitó una lista de 18 convocados para el partido de este fin de semana una lista que apuesta por una política continuista. Sin dar indicios al cambio o a la renovación, como si no encontrase otros actores en su plantilla con capacidad para dar un giro al equipo, Herrera metió en su lista de elegidos a Wakaso Mubarak en detrimento de Vicente Gómez.
Esta es una de las pequeñas novedades de la convocatoria de un equipo que partió ayer hacia Getafe en busca de una victoria que sirva para revertir una dinámica peligrosa, compuesta por dudas en el juego y su sistema, pobres resultados y hasta tensión en los entrenamientos. Una combinación delicada que puede engullir a la UD Las Palmas en una espiral derrotista de la que suele costar escapar.
Wakaso Mubarak se sube a otro avión en una semana enorme para él, donde ha sido capaz de ganar y robar horas al mundo dentro de una aeronave. Tras acabar el partido contra el Eibar, la UD Las Palmas tenía la obligación de liberar a su único futbolista internacional. La primera parada del medio fue París, donde junto a otros compañeros realizó algunos entrenamientos antes de reunirse con el grueso de su selección en Washington, la capital de los Estados Unidos. Eso fue en la mañana del nueve de octubre. Para ese día, Ghana tenía previsto un partido amistoso ante Perú que fue suspendido. El pasado martes, a las 7.00 de la tarde hora local, su selección empató 1-1 contra Canadá. Wakaso, titular en el mediocentro con Avram Grant, disputó casi 70 minutos. Tras pasar todo el miércoles viajando de vuelta a París, el jueves por fin pisó Gran Canaria. Con sólo el entrenamiento del viernes y el de ayer por su compromiso con Ghana, Wakaso Mubarak se sube al vagón de los fijos.
Su regreso se une con la vuelta tras lesión de un 'intocable' para Herrera como es Hernán Santana,. El futbolsita de Zárate sufrió una microrrotura en el vasto interno del abductor derecho en la semana previa al enfrentamiento contra el Eibar en el Estadio de Gran Canaria, el último partido de la UD Las Palmas en la competición.
El primer plazo estimado de recuperación se alargaba hasta un mes. Sin embargo, esta herida se ha sanado aparentemente antes de tiempo y ha acortado en casi dos semanas el primer tiempo de baja que facilitaron los servicios médicos del club. Una recuperación casi milagrosa para el hombre destinado a ser el pivote de esta UD.
Con esta nueva alta más la llegada a tiempo de Wakaso Mubarak, el dedo de Paco Herrera volvió a señalar a Vicente Gómez. El centrocampista se acerca con peligro al clan de los futbolistas desterrados. Hombres que a los ojos del técnico amarillo se reflejan como recursos existentes y palpables, pero invisibles a la hora de actuar. De momento, así es la temporada de Vicente Gómez. Renovado hasta 2020 al comienzo de la campaña, acumula 36 minutos en dos partidos -28 contra el Atlético y 8 en casa ante el Sevilla CF- siempre partiendo desde el banquillo.
Este verano, Asdrúbal Padrón también renovó por el club. Tres temporadas más y aún no sabe lo que es ir convocado en Primera. Tana, cuyo proceso para continuar en la UD dos años más también está abierto, tampoco ha experimentado esa sensación. Momo Figueroa apareció 26 minutos en el Vicente Calderón en el primer partido de la competición y desde entonces desapreció para Herrera. Tres hombres que cada vez tienen más complicado reengancharse a la pizarra de esta UD.
Quien por lo menos está dentro de los 18 es Garrido. El lateral vasco entró en la convocatoria para el Nou Camp pero fue el descarte de Herrera. Hace dos semanas contra el Eibar se sentó por primera vez en el banquillo tras la baja de Antolín Alcaraz. Una baja que podría darle alguna opción para debutar.
