"Tener la pelota para correr menos", pedía Quique Setién a sus jugadores durante el entrenamiento de ayer. Es una de las instrucciones más repetidas por el técnico de la UD Las Palmas desde su llegada y que se refleja en los partidos. Quiere el técnico a un equipo que apueste por el balón no solo para atacar, sino también como mecanismo de defensa. Y por ello no para de insistir en las sesiones, que tienen el patrón común de la posesión de la pelota.
En el entrenamiento de ayer ordenó varios rondos y dividió a la plantilla en tres equipos que tenían que mantener el balón en dimensiones reducidas mientras uno de ellos intentaba robarla. Se trata de una de las actividades más repetidas por el cántabro desde su aterrizaje en la Isla.
Presión e intensidad
Sus órdenes y gritos, eso sí, no están siempre relacionados con la posesión de balón, sino todo lo contrario. Setién, y también su ayudante Eder Sarabia, gritan continuamente reclamando intensidad y concentración en los jugadores: "¡Por estar desconectado y no correr tres metros luego tengo que correr 80 hacia atrás!", gritaba el segundo de Setién, que intentaba concienciar a sus jugadores de la relevancia de presionar en campo contrario para recuperar el balón cuanto antes y ahorrar esfuerzos. "¡Un esprint de cinco metros te evita correr cinco minutos!", insistían.
Y a cada orden de los entrenadores reaccionaban los jugadores poniendo más intensidad bajo el calor de Barranco Seco. La plantilla está enchufada tras el cambio en el banquillo y todos quieren agradar al nuevo entrenador. La sesión, que empezó a las 10.00 de la mañana, duró algo menos de dos horas.
Este miércoles la plantilla insular volverá al trabajo en Maspalomas con un partidillo contra Las Palmas Atlético a partir de las 10.00 horas. Mañana y el viernes, de nuevo en Barranco Seco.
