"Instituto de Córdoba es una institución ejemplar, cuna de grandes y buenos jugadores, pero que está prácticametne en la ruina. Esperemos que Mateo siga la estela de esos grandes en su periplo en la UD Las Palmas". Quien así se expresa es Miguel Ángel Brindisi, uno de los argentinos de oro que militaron en la década de los setenta en la UD Las Palmas y que lleva al equipo amarillo en lo más hondo y profundo de su corazón, como en más de una ocasión ha demostrado.
Y es que, de las filas de Instituto salieron nada más y nada menos que dos campeones del mundo con Argentina en 1978: Mario Alberto Matador Kempes y Osvaldo Ossie Ardiles. Además, en el conjunto cordobés, que ahora se desenvuelve en la Primera argentina -equivalente a la Segunda división española-, también militaron otros conocidos del fútbol español, como Óscar Dertycia -exjugador del Tenerife, entre otros equipos- y Diego Klimowicz -exjugador del Rayo Vallecano-.
La cara del club en Sudamérica
Desde el pasado mes de abril, Miguel Ángel Brindisi forma parte del cuadro técnico de la UD Las Palmas. "Soy la cara del club en Sudamérica. Represento a la UD a propuesta de Miguel Ángel Ramírez y Toni Cruz; y estoy encuadrado dentro de la secretaría o dirección técnica. Soy ojeador del club. Veo cuatro o cinco partidos en cada fecha de fin de semana y envío puntualmente mis informes al club. Dependo de Luis Helguera y Toni Cruz, y a ellos remito toda la documentación", señalaba Miguel Ángel Brindisi a este rotativo.
Era, pues, de obligado cumplimiento conocer la opinión del exinternacional argentino y exjugador y entrenador de la UD Las Palmas acerca del nuevo fichaje del club amarillo, su compatriota Mateo García.
"En primer lugar he de decir que este fichaje es todo un acierto de la dirección técnica de la UD. Toni Cruz y Luis Helguera le tenían bien controlado y yo sólo me he limitado a seguirle para emitir los informes pertinentes que me solicitaron. En abril vino Luis a Buenos Aires, nos reunimos y comencé a trabajar para la UD. A partir de ahí me pidieron el seguimiento de varios jugadores, dentro de los perfiles de lo que buscaba el técnico, Quique Setién, para reforzar el equipo y uno de ellos, de los que estaba en su listado ["los otros me los reservo", señala] era este pibe de Instituto, Mateo García, que ahora han fichado. Pero el mérito de su contratación es de la UD, no mío", indicaba Brindisi.
"Me pasé a verle varias fechas y tocó coincidencia de que pude hablar con el técnico que le entrenaba en Instituto, un conocido, Héctor Óscar Rivoira, el Chulo, al que sustituí al frente de Huracán en 2010. Ahí comencé a conocerle un poquito más al pibe y ya luego todo fue verle muchos partidos y preguntar en su entorno cómo era. Un chico familiar y humilde, sencillo. Porque te digo una cosa: yo sigo las mismas directrices que entonces seguía don Jesús García Panasco para contratar a los jugadores que contrató, como a mí. Llamáme chapado a la antigua, pero es así. Ése es el método que funciona, el de don Jesús", apuntaba Miguel Ángel Brindisi.
La 'joyita' de Instituto
Acto seguido, el genial '8' de la UD Las Palmas, añadía que: "Mateo es la joyita de Instituto. Marca la diferencia. Es un zurdo muy hábil, que en todos los partidos se echaba el equipo al hombro -a la espalda, como dicen ustedes-. Tiene futuro y porvenir, porque además es un pibe sencillo, humilde, buen pelotero y buen profesional. Creo que es una apuesta muy interesante de la UD Las Palmas. Tiene personalidad y pide siempre el balón. A veces se arranca por derecha e incluso hace de enganche, y no tiene que perdírselo el técnico para hacerlo".
Y Brindisi siguió escudriñando su análisis sobre el nuevo jugador amarillo: "tiene desborde, freno, es atrevido y no se arruga. Ya digo que siempre pide el balón. Esas son sus características y eso es lo que he descrito en mis informes. Creo que la UD hace una buena inversión, sobre todo porque, como decimos acá, puede sacarle el jugo y lograr un buen capital en una futura venta, porque es un pibe que está llamado a triunfar. Yo creo que, pese a sus 19 años, no es de los de trasnochar y si de los que tienen bien los pies en el suelo y sabe lo que quiere. No es de los que va a extrañar a la novia, a los padres o a la tierra. Es del interior y estos son diferentes a los de la capital. Va a triunfar porque es un pibe que tiene muy claro lo que quiere".
Por último, Miguel Ángel Brindisi señalaba que: "por momentos, y para que podás tener una referencia, se me hace recordar a López Ufarte. ¿Lo recordás al Roberto? Yo no lo recuerdo, lo sufrí -y se echa unas risas mientras dice: "me pintó la cara varias veces el muy..., qué bárbaro, como jugaba el pequeñajo ése"-. Pues este pibe tiene esas maneras, o también se me hace recordar a los inicios de mi compatriota Gustavo López en el Celta de Vigo y en el Real Zaragoza".
