Se apoderó de mi cuerpo sin motivo ni razón .

Él , que sin piedad me `posee .

Él , qué con sus caricias cada milímetro de mi piel acapara ,

a cualquier hora del día , desde la noche hasta la mañana .

Me susurra quedito a veces , otras como tremendo huracán

me viene a zangarrear

Me rompe en mi pedazos , a su entera voluntad .

Sus besos son garfios que en mi piel se clavan .

Son dagas que todo mi cuerpo traspasan .

Tú , amante inoportuno al que tus caricias yo no respondo ,

por eso siempre de tí yo me escondo .

Tras de una melodía .

Tras una meditación .

Escribiendo mis letras para darte por un tiempo plantón .

Yo gaviota libre al cielo imploro , hundirte en el más profundo foso .

Quiero que tú sepas que mi alma jamás conseguirás acaparar ,

aunque mis noches sean grises y mis días sombríos .

La esperanza en mi espíritu jamás quebrantarás .

La Luz que hay en mi destino , yo sé que de tí me va apartar .

Así yo te diré , adiós a tu presencia , adiós a tus tinieblas .

que la esencia del Amor Divino mi alma sustenta .

Ana María