Los autónomos y las pymes canarias podrán pagar el Impuesto General Indirecto Canario (IGIC) una vez que hayan cobrado las facturas, según anunció ayer en el pleno del Parlamento regional el consejero de Economía y Hacienda, Javier González Ortiz. Este sistema, que tendrá carácter voluntario, entrará en vigor al mismo tiempo que la nueva norma estatal que prevé este cambio para el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) durante el año próximo.

El Gobierno de Canarias ofrecerá a las empresas la posibilidad de sustituir el criterio de devengo (cuando se emite la factura), único actualmente establecido, por el de caja (cuando se cobra) como método para ingresar el impuesto, informó el consejero. Los empresarios han reclamado del Ejecutivo autónomo que aplique el criterio de caja a los devengos del IGIC.

González Ortiz advirtió, no obstante, que la Consejería que dirige está a la espera de conocer los pormenores y el alcance de la legislación estatal y destacó que esta nueva fórmula "facilitará la tesorería de autónomos y pymes, pero también tendrá un impacto inicial sobre las cuentas públicas que es necesario solventar". Según explicó, los efectos de implementar en las Islas el nuevo criterio del Estado no solo repercutirán en las arcas de la Comunidad Autónoma sino también en la de cabildos y ayuntamientos.

"La medida", dijo, "causará una demora inicial en los ingresos corrientes en, al menos, un trimestre que provocará un desajuste importante en la tesorería de las administraciones públicas canarias y que también tendrá efectos en el cómputo final de su déficit".