El presidente del Cabildo de Fuerteventura, Mario Cabrera, considera "una ofensa" que el Ministerio de Industria pida depositar 60 millones de euros a Repsol como seguro ante posibles riesgos durante las prospecciones petrolíferas y ha señalado que con esa cantidad "no se compra a los canarios".

El Boletín Oficial de Estado ha publicado este miércoles la autorización del Ministerio de Industria a Repsol para realizar sondeos en busca de hidrocarburos a unos 60 kilómetros de las costas de Fuerteventura y Lanzarote.

Entre las medidas que deberá tomar Repsol, antes de iniciar las perforaciones, se encuentra constituir un seguro civil de 40 millones de euros y una garantía de 20 millones para cubrir responsabilidades medioambientales.

Cabrera, en declaraciones a Efe, cree que este seguro supone "una ofensa y un atentado a la inteligencia", a la vez que se pregunta si con esa cantidad se solucionará el abastecimiento de agua a la población si se llega a producir un derrame en el mar en unas islas donde el consumo de agua proviene de la desalación de agua de mar.

Además, la petrolera deberá colocar en Fuerteventura y Lanzarote sistemas de control de la sismicidad que alerten de cualquier movimiento que se produzca en el subsuelo como consecuencia de las perforaciones.

También debe comprometerse a paralizar las prospecciones si se produce un terremoto natural con intensidad superior a 4,5 en la escala de Richter en un radio de 75 kilómetros del sondeo.

El nacionalista, amparándose en distintos estudios geológicos, ha señalado que con las prospecciones se intensifican las posibilidades de un posible movimiento sísmico, en unas islas donde ya "sin perforaciones hay movimientos".

Para el presidente del Cabildo majorero, la autorización del Ministerio de Industria a la multinacional petrolera supone "un paso más de este largo proceso" y ha avanzado que continuará la lucha a pesar de reconocer que "pocos recursos quedan por la vía política".

El nacionalista ha mostrado su descontento por la postura del presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, que se plantea descartar las prospecciones en Baleares si estas suponen algún peligro, mientras el ministro Soria da luz verde a la propuesta de la petrolera en aguas canarias.

Para Cabrera esto supone un ejemplo de cómo gobierna la derecha en este país "con distintas varas de medir según sean las presiones de los empresarios".

Asimismo, lamenta que Rajoy no haya querido escuchar las reiteradas peticiones del Cabildo para llevar a cabo una reunión donde mostrar la oposición a las prospecciones o que haya hecho "oídos sordos a las multitudinarias manifestaciones de la población canaria".

El majorero ha anunciado que a partir de ahora seguirá la lucha a través de la vía jurídica en Europa y el movimiento ciudadano sin olvidar que el Tribunal Supremo tramita un incidente de nulidad contra la sentencia del Alto Tribunal que rechazaba los siete recursos presentados en contra del decreto del Gobierno español de marzo de 2012 que autorizaba las prospecciones.

También ha lamentado que la publicación de la autorización en el BOE se produzca en pleno mes de agosto lo que supone, a su juicio, un hecho de "cobardía política" por parte del ministro de Industria, propio de alguien que "hace daño y se quiere esconder".