¿Está ya en campaña electoral? Por su agenda en Canarias con reuniones con el presidente del Gobierno, sindicatos, empresarios o afiliados así lo parece.
No. El país no se puede parar pese al bloqueo de alguno para poder constituir un gobierno de cambio, y por eso me estoy reuniendo con los presidentes autonómicos y me parece importante revitalizar el diálogo social con empresarios y sindicatos y lo estoy haciendo en cada una de las comunidades autónomas. Hay dos tipos de trabajo: uno, más de negociación con los partidos políticos, y dos, con las instituciones para saber cuáles son los problemas, y en el momento en que podamos llegar al gobierno empezar a solucionarlos.
Se va a reunir con Pablo Iglesias. ¿Qué espera de esta cita?
A mí me gustaría que la nueva política dejara a un lado las exclusiones y los vetos y pudiéramos hablar de las cosas que nos unen, porque a las fuerzas del cambio nos unen muchas cosas. Cuando me presenté con el acuerdo de Ciudadanos a la investidura, de las doscientas medidas en términos de emergencia social, de lucha contra la desigualdad, de regeneración democrática y de crecimiento económico, contabilizamos que 140 contarían con el respaldo de casi doscientos diputados, es decir, una mayoría muy amplia. Por tanto, yo lo que propongo es eso, porque al final ¿qué es lo que ocurre? Ocurre que la actitud de bloqueo de Iglesias a lo que está dañando y afectando es a millones de personas que están sufriendo la crisis, la desigualdad y los recortes practicados por la derecha. Por tanto, a la única persona que está beneficiando es a quien está infligiendo esas políticas, que es la derecha, el PP y Mariano Rajoy y, por tanto, espero que Iglesias reconsidere su posición y permita salir de este bloqueo y tener un gobierno de cambio.
¿Cómo? ¿Absteniéndose o entrando en el Gobierno?
Nunca me he cerrado a ninguna opción. Es verdad que a mí me gustaría fiarme del señor Iglesias pero hay muchas cosas que ha hecho durante estos tres meses que me llevan a pensar lo contrario, desde el planteamiento que hizo del gobierno con su vicepresidencia, el famoso derecho a la autodeterminación de Cataluña o la cuestión del debate de investidura que, al final, votó en contra, con unos argumentos bastante insólitos, a mi presidencia. Pero estoy dispuesto a dejar todo eso a un lado, y creo que lo importante es que nos sentemos, dialoguemos y que lleguemos a un acuerdo, porque los votantes de Podemos no entienden ahora mismo cuál es la posición de Iglesias, los votantes de Podemos no votaron a Iglesias para que esté manteniendo a Rajoy como presidente del Gobierno.
Las fricciones que hay en el seno de Podemos ,¿pueden afectar a la negociación con el PSOE?
Espero que no. Soy muy respetuoso con la vida interna de los partidos políticos, por cierto, Iglesias no lo ha sido cuando hemos tenido situaciones críticas en el partido, pero yo sí lo soy, y a mí me gustaría que de puertas para fuera pudiéramos llegar a un acuerdo.
El ministro en funciones José Manuel Soria ha dicho que no se empecine en rechazar un pacto con el PP porque solo conllevará unas nuevas elecciones, y que un gobierno entre el PSOE y Ciudadanos pondría en riesgo la recuperación económica. ¿Qué le parece?
Creo que la derecha siempre utiliza el discurso del miedo. Ha bastado tan solo el riesgo de que pierda el poder el PP para que empiecen a anunciar los siete males: que si ETA se está frotando las manos, que si se va a poner en riesgo la recuperación económica... Al final, lo que tenemos que hacer es ejercer el mandato del pasado 20 de diciembre donde nos dijeron claramente que querían un cambio y cuanto más lejos situemos a España de la desigualdad, la corrupción y el enfrentamiento de territorios que ha provocado el PP mucho mejor. Cuando escucho a analistas políticos hablar de la dificultad de la aritmética del Congreso digo que no es cierto. Si lo miramos con los ojos clásicos no hay una mayoría de izquierdas ni de derechas, y la lógica de la izquierda o la derecha no es la solución a la aritmética parlamentaria, sino hay que plantearlo en términos de cambio o continuidad, e Iglesias tiene que saber que o hay gobierno de cambio o hay elecciones y depende de él que no haya elecciones.
¿Cree que está siendo claro con usted o busca unas nuevas elecciones?
A mí me gustaría que Iglesias dijera la verdad a los españoles porque cuando habla de un gobierno de izquierdas sabe que los números no salen. Me encantaría tener un gobierno solo de izquierdas, el problema es que los españoles han votado gobiernos transversales para acuerdos transversales, en educación, en la lucha contra la desigualdad, en la regeneración democrática donde hemos propuesto el fin de los aforamientos... El acuerdo con Ciudadanos plantea una salida centrada al atasco político que han metido Rajoy e Iglesias ahora mismo a la gobernabilidad en nuestro país.
¿Que le impide ese pacto constitucionalista, Rajoy o el PP?
Los dos. Con el PP nos podemos entender en la lucha contra el terrorismo, en la defensa de la integridad territorial, pero nosotros no tenemos el mismo modelo económico y social que el PP. No somos lo mismo y desde ese punto de vista queremos articular otra mayoría. Lo que no me esperaba es que con una persona con la que tengo muchas diferencias ideológicas, como es Rivera, me pudiera entender y encontrar un territorio común con 200 medidas que suponen mejoras, y con Iglesias tenga esas dificultades.
Ante la reunión con Pablo Iglesias Albert Rivera ha dicho que puede ser que el PSOE llegue a acuerdos con Podemos.
Rivera sabe, y se lo he dicho en privado y en público, que el acuerdo con Ciudadanos es un acuerdo firme abierto a otras formaciones políticas ,y que lo llevaré hasta el final, y me gustaría que pudiéramos ejercerlo desde el gobierno,
Eso parece inviable, la verdad.
No es que sea inviable es que Ciudadanos representa una fuerza del cambio y el PSOE también, es Podemos quien se está autoexcluyendo de ese cambio.
¿Y si renunciara Rajoy cambiarían de opinión?
El PSOE ha sido bastante claro desde el principio.
¿Qué cree realmente que va a suceder? No lo que a usted le gustaría que pasara...
A mí me gustaría que no hubiera elecciones y creo que habrá gobierno. Sí. Y espero que sea un gobierno de cambio, transversal, un gobierno no de una única ideología política que es lo que han votado los españoles, sino que sea un gobierno que tenga un mestizaje ideológico.
Se dice que Susana Díaz se está postulando como secretaria general. ¿Usted la ha llamado para ver si es así?
Mire, tengo empeñada toda mi energía en intentar formar un gobierno y que no se repitan las elecciones. ¿Le parece poco con lo difícil que está ? (Risas)
Si hay elecciones, ¿qué prospección hace?
Según lo que dicen las encuestas, creo que al final lo que ocurrirá es que habrá un resultado muy semejante y lo que tendríamos que hacer es evitar que haya elecciones.
¿Se presentará de nuevo como candidato si las hubiera?
Por supuesto que sí. Esa es mi propuesta pero también le digo que espero que no haya elecciones, porque sería un fracaso para la política y no lo podemos permitir.