La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Giro político | Moción de censura en Santa Cruz de Tenerife

Evelyn Alonso: "Me he sentido amenazada por parte de Patricia Hernández"

"En la gestión municipal de urbanismo hay injerencias poco éticas y la alcaldesa mira para otro lado", explica edil de Cs en Santa Cruz de Tenerife firmante de la moción de censura

Evelyn Alonso: "Me he sentido amenazada por parte de Patricia Hernández" MARÍA PISACA

¿Feliz en este regreso a la política municipal?

Feliz, pero con una sensación agridulce porque vuelvo por la dimisión Juan Ramón Lazcano y eso no es del agrado de nadie. Pero estoy contenta porque vuelvo a tener la oportunidad de retomar todos esos proyectos que hicimos en el mandato anterior.

¿Por qué decide apoyar a Bermúdez y no a Patricia Hernández?

No es una cuestión de apoyar a Bermúdez o a Patricia. A pesar de haberme quedado fuera de la Corporación el 26M, he seguido la gestión municipal por medio de colectivos, del seguimiento de plenos, de propuestas, mociones... Me he dado cuenta que ese cambio que se había anunciado cuando se quitó a CC después de años de poder no se ha producido. Todo lo contrario. El proyecto no puede ser quitar un partido para poner otro, tienes que tener una alternativa real. Y aquí no existía. Hemos visto episodios desagradables, como esa caravana musical que me pareció una falta de respeto no solo por los fallecidos sino por cuantos tienen personas ingresadas o sufriendo o porque has perdido tu trabajo.

Pero no dirá que presenta la moción de censura por la cabalgata de Patricia Hernández.

No, no es por la cabalgata, pero sí porque hay una no gestión durante un año que no tiene nada que ver con sacar una ciudad adelante.

¿Matilde Zambudio [la otra edil de Cs, en el equipo de Gobierno de la alcaldesa del PSOE ] y Alonso forman parte del mismo partido?

Yo soy de partido, porque así lo he sido durante 6 años; y ella es de Ciudadanos porque así lo ha dictaminado un juez con las cautelares.

¿La postura de la moción de censura es de Evelyn o de Cs?

La postura de la censura es mía con los idearios de Ciudadanos. El partido debe entender que debe haber un gobierno estable de catorce concejales; hasta ahora teníamos once apoyados por tres de Podemos. Primero porque las políticas de Podemos no tienen nada que ver con las políticas económicas de Ciudadanos; son antagónicas. Y segundo, tienes que tener un proyecto reforzado, ya sea con CC, PP o PSOE, porque al final lo que prima es el proyecto, las ideas que tengas para tu ciudad.

Cuando Juan Ramón Lazcano renuncia el 16 de abril, ¿la llamó para comunicárselo?

Me enteré de la dimisión de Lazcano por El Día y me quedé impactada, aunque ya se oía que había injerencias en su gestión en Urbanismo.

¿Injerencias?

Sí, porque se estaban metiendo en su trabajo con fines poco éticos que él mismo denunció en el partido y previamente en el ayuntamiento de lo que estaba pasando.

¿También por escrito?

Sí, remitió informes por escrito para dar cuenta de que no estaba contento o que no se estaba respetando el pacto.

¿Y de quién era la injerencia?

Las injerencias eran de parte de Zambudio y se puede decir que Patricia Hernández estaba mirando para otro lado.

¿Por qué se va Lazcano?

Por Matilde Zambudio y Patricia Hernández.

¿Algún proyecto que le pararan? ¿Se le atravesó el proyecto de Las Teresitas? ¿El Toscal?

Cuando Lazcano entró, uno de sus compromisos fue sacar el plan de Las Teresitas y se encontró que Podemos se opuso y el PSOE, en vez de apoyar a su socio de gobierno, se posicionó a favor de Podemos y Matilde Zambudio, en vez de apoyar a su compañero y hacer valer que somos llaves de gobierno, se fue a apoyar al PSOE y dejó a Lazcano solo. Y así ocurrió con el 30% del presupuesto de Urbanismo que desviaron a proyectos de Podemos o querer intervenir en ciertas decisiones urbanísticas que no eran de competencia ni de Zambudio ni del PSOE. Lazcano no iba a permitir que se hiciera nada que no fuera informado positivamente por los técnicos y los servicios jurídicos. Ahí comenzaron los inconvenientes.

De haber dependido de usted, ¿con quién hubiera pactado al inicio de este mandato?

CC ganó las elecciones y eso es un punto importante, porque ahí está demostrada la mayoría del voto de los santacruceros. También ver no con quién pactas sino lo que pactas. Viendo la dependencia de Podemos, hubiera hecho un pacto con Coalición Canaria y PP.

¿La moción de censura es por despecho con Zambudio o convicción política por Santa Cruz?

Por convicción política hacia los vecinos de Santa Cruz; aquí Zambudio no tiene absolutamente nada que ver. Quiero dejar zanjado ese tema ya; no me quita un minuto de mi tiempo.

¿Qué siente cuando la llaman tránsfuga quienes no obedecieron las instrucciones del partido y pactaron con el PSOE?

Tránsfuga lo tiene que determinar tu propio partido. A mí me han achacado ataques que nunca he tenido ni contra los compañeros del Cabildo ni de Santa Cruz.

¿Se siente más de Ciudadanos que Matilde Zambudio?

Me siento miembro de Ciudadanos como el que más; no sé la intensidad con la que se siente Zambudio, pero la mía no me la cuestiona nadie.

¿Zambudio y Lazcano desobedecen al apoyar a Patricia Hernández como alcaldesa?

Había directrices claras de votarse a sí mismo; decidieron romper esa disciplina de voto y fueron expulsados. Al final se ha llegado a un acuerdo con Lazcano en Santa Cruz y con Zambudio sigue el proceso judicial. Tengamos claro que tránsfuga no lo dice Evelyn Alonso o cualquier afiliado o compañero de partido, sino lo tiene que dictaminar la formación como ocurrió con el informe que se remitió al ayuntamiento para proceder a la expulsión.

¿Se siente apoyada por la Dirección Nacional de Cs, que dice no compartir la censura?

Creo que le falta información y mi partido siempre me tendrá para explicar lo que ha pasado. No me siento sentenciada. Respeto el comunicado que ha enviado mi partido y en los próximos días, según se vayan viendo los acontecimientos, iremos hablando. Nunca hablaré mal públicamente de mi partido.

¿Ese diálogo tiene que ser en Madrid?

Sí, esas conversaciones deben de ser en Madrid porque ahora mismo en Canarias no hay ningún interlocutor.

¿Si le quitan el apoyo en qué situación se quedaría usted en Santa Cruz?

Me quedaría gobernando como no adscrita.

¿Eso se traduce en que gestionaría áreas aunque sin sueldo?

Sí, si me declara tránsfuga mi partido y lo comunica el ayuntamiento. Eso se traduciría en que no tendría sueldo pero sí puedo desarrollar mis competencias en áreas.

¿Le merece la pena?

Sí, porque me motivan muchísimo las áreas que voy a gestionar y ya procedería de forma paralela a las acciones judiciales pertinentes a las que pudiera tener derecho. Cobraría las dietas de asistencia al ayuntamiento, como ya hice en el mandato pasado cuando estuve en la oposición.

Vamos, a cambio de las dietas de plenos y comisiones hasta se comprometería a gestionar.

Sí, no me motiva el sueldo sino las áreas que gestionaría.

¿Qué cara se le quedó cuando después de tres años de concejala Cs la colocó de número tres?

En ningún momento quise ser candidata a la Alcaldía.

Pero al menos aspiraría a entrar en la lista.

Aspiraba a entrar en lista con los dos compañeros con los que compartí el mandato anterior y con los que no se contó. Todos sabemos cómo se llevan aquí los cabezas de lista en este partido y es por ser amigo de... Así llegó Matilde Zambudio a ser candidata en Santa Cruz.

¿De quién era amiga Matilde Zambudio para ser candidata?

De Juan Amigó y de Mariano Cejas.

Cuando se va Lazcano y se sabe que va a entrar usted, ¿quién la llama antes: Bermúdez, Patricia o Matilde?

No me llamó nadie porque yo apagué el móvil durante un tiempo, pero me escribieron tanto Bermúdez como Guillermo Díaz Guerra para darme las felicidades por el regreso, al igual que otros compañeros de CC y PP. Y me comentaron que ya iniciarían los contactos con Madrid. De Patricia Hernández no supe nada. Yo ya les dije que me mantendría en silencio y que si ellos querían, que hablaran con Madrid, que es con quien tenían que hacerlo, y que no me volvieron a molestar más.

¿Cuándo fue su último contacto con Zambudio?

Mi última conversación con Matilde fue la noche electoral del 26 de mayo, cuando me dijo que estaba contenta porque no le hacía falta porque le daban los números.

Y ahí se acabó el amor

Me quedé muy sorprendida y los siguientes días me llamó Lazcano para preguntarme cómo estaba y decir que había sido muy duro que no saliera electa, máxime porque él reconoció que acababa de aterrizar en Ciudadanos y admitía que me conocía y me quería todo el mundo. Juan Ramón me planteó que me quería como personal de confianza. Desde entonces no supe nada más hasta ahora, con todo esto que ha pasado.

Pero no llegó a entrar en el equipo de Lazcano.

No entré a trabajar con Juan Ramón porque Matilde se negó. Lazcano fue a hablar con Patricia y le dijo que si Zambudio no lo autorizaba ella no me podía nombrar como personal de confianza.

¿Y por qué Lazcano en vez de irse no presenta la censura?

Porque igual no estaba dentro de sus ideales en ese momento; él había apostado por ese cambio. Siempre salvo de todo esto a Juan Ramón porque es una persona muy íntegra, muy noble, un profesional como la copa de un pino. Él se sintió engañado porque Matilde nunca lo dejó participar en las negociaciones. Tanto Teresa Berástegui como Vidina Espino o José Guerra siempre preguntaban por qué no venía también Juan Ramón Lazcano y Zambudio decía que de eso se encargaba ella y cuando llegó el momento de la votación, Lazcano hizo siguiendo la instrucción que le transmitió Matilde.

¿Zambudio y Patricia se conocía antes de las elecciones?

Lo ignoro, pero el pacto ya venía cociéndose desde antes, como dijo Fran Hervía, que reconoció en una reunión posterior a lo que había pasado que el señor Ábalos lo había llamado para decirle que se olvidara de Santa Cruz porque eso [el pacto] estaba cerrado ya.

¿Pero no la llamó Zambudio?

Después del 26 de mayo, la siguiente noticia que tuve de Matilde Zambudio fue en febrero o marzo, cuando ya se sabía que Juan Ramón se iba a ir, y me mandó a su secretario a ofrecerme un puesto de trabajo en el ayuntamiento. Le dije que sí, porque quería saber hasta dónde llegaba la mezquindad de las personas. Me parece de poca vergüenza que tú, de una compañera de la que no has sabido nada en un año, que has hecho todo lo posible para que no entre en el ayuntamiento, le vengas a ofrecer un puesto de trabajo y creas que te lo vaya aceptar. De hecho le dije que sí por escrito dándole largas a ver hasta qué punto podían llegar, sin intenciones de dejar el Parlamento, pero ahí me di cuenta de la calidad de persona que es. No trabajo así, no funciono así y no compro a las personas por un sueldo ni las trato como si fuera menos que yo. Luego llegó el Covid-19 y no se continuaron los contactos... Creo que pillaron las indirectas después de tantas largas. Y después de eso no tuve más contactos.

¿Zambudio no le escribió cuando ya se sabía que iba a tomar posesión como concejala?

Sí, me mandó un mensaje para quedar y enseñarme unos papeles. Le dije que sería después de la toma de posesión porque no era el momento y necesitaba estar tranquila; lo que no iba a permitir es que me contaminaran con papeles e informes.

¿Patricia Hernández se puso en contacto con usted?

Es curioso. Con Patricia nunca he hablado, solo la he saludado cuando hemos coincidido en algún acto. Yo del PSOE lo único que he tenido son mensajes por medio de personas cercanas a mí.

¿La alcaldesa la llamó?

Cuando se entera que voy a ir a recoger mi acta a la Secretaría del pleno es mi primer contacto, porque me escribe y me dice: "Hola, me he enterado que vienes a recoger el acta. Pásate por mi despacho y hablamos un ratito. Patricia Hernández". Y yo pensé que ni soy su subordinada, ni estoy a su disposición y las formas son muy importantes. Podía haberlo planteado de otra forma... Sólo le faltó decirme tráeme un café con sacarina. Para mí las formas son muy importante, porque solo me la he cruzado tres veces en mi vida de hola y adiós. Las formas determinan la clase de persona que es.

¿Cómo decide dar el paso de la moción de censura?

A través de contactos con Guillermo Díaz Guerra, Carlos Tarife, Juanjo Martínez, Alfonso Cabello, José Bermúdez... No había perdido el contacto con los compañeros de la Corporación anterior.

¿Y cuándo se plantean presentar la censura?

Cuando Juan Ramón Lazcano se fue, varios colectivos sociales se pusieron en contacto conmigo y me plantearon que era una oportunidad de reconducir el Ayuntamiento. Pensé: si me están diciendo que era el momento, ¿por qué no plantearlo al resto de compañeros de CC y PP? Eso fue después del 17 de abril, cuando se marchó Lazcano; ellos a mí no me molestaron ni me presionaron, a diferencia de las presiones diferentes que he tenido con el PSOE y su entorno. Del PP solo recibí la bienvenida y me dijeron que se pondrían en contacto con Madrid para hablar. No sólo recibí mensajes de políticos sino de los colectivos con los que había estado trabajando en el mandato pasado y me hizo pensar que lo que yo estaba viendo no era una percepción personal.

¿Y cuándo hay un contacto más personal?

Pues nos llamamos y nos planteamos la posibilidad de avanzar en un proyecto conjunto.

¿Fue en un cortado?

No, en esa época estábamos en confinamiento y no podíamos quedar.

O sea que armaron la moción de censura por Zoom.

Sí, por Zoom, y por llamadas recopilando información, sobre todo CC y PP, que tenían los expedientes más cercanos que me permitieron contrastar los datos que me había dicho Lazcano. Yo he tomado decisiones bajo hechos, no porque me cayera mejor o peor una persona. Entonces decidí que era la oportunidad de presentar la moción de censura por los hechos, con las pruebas y porque el pacto de Patricia no era bueno para Santa Cruz.

¿Cuándo le dio el sí, quiero

El sí, quiero se lo di a CC y PP hace un mes porque con el confinamiento hemos tenido mucho tiempo para pensar, para recopilar información.

¿Ha recibido amenazas por apoyar la moción de censura?

Sí, me he sentido amenazada por parte de Patricia Hernández.

Pero, ¿de ella en particular?

Sí, por medio de una persona muy cercana y en la que confío plenamente. El último recado que tuve es: "la moción de censura de Santa Cruz no solo se firma, sino que también hay que votarla y seguir viviendo en Santa Cruz, ¿o se va a mudar?", a lo que añadieron: "Si Evelyn vota finalmente la moción de censura, sus próximos tres años serán un infierno porque tengo papeles". Ante esa afirmación yo pienso: ¿qué quiere decir eso: no voy a estar en Santa Cruz, me va a pasar algo? Como comprenderá, eso me puso los pelos de punta.

¿Eso se ha quedado ahí o ha denunciado?

Lo he hablado con mis abogados y estamos estudiando las vías a ver cómo se puede llegar.

¿Eso que comenta se lo dijeron a usted de forma oral o en un mensaje?

De forma oral, una persona también muy cercana a Patricia.

¿Un político?

No, no es político, y fue el último recado que me dio.

¿Por que desde el entorno de Patricia ya le habían enviado más mensajes?

Sí, ya me habían estado tocando; a mí directamente no porque vieron que no estoy por la labor.

¿Que le llegaron a ofrecer a cambio de su apoyo al PSOE en Santa Cruz?

Me han llegado a ofrecer por medio de personas cercanas puestos en el Gobierno de Canarias y en el Cabildo.

¿Y cuando se refiere a personas cercanas se refiere a interlocutores a los que le da crédito?

Sí, por supuesto. Me dijeron: me acaba de llamar Fulanito, del PSOE, y me dijeron que tenemos esta oferta, y claro, yo les decía: esto no es cuestión de dinero. Yo tengo el sueldo seguro pactando con PSOE y Podemos si pensara en el dinero. Pero yo no voy así.

Vamos, que casi, casi podía haber llegado a ser consejera en el Gobierno de Canarias...

Hubo ofertas importantes, pero no soy yo. Han dado con un hueso porque no me conocen.

Está casada y tiene un hijo. ¿Se siente amenazada?

Sí, por supuesto. Lo primero que se me pasó por mi cabeza fue mi niño. Creo que eso no son maneras y estoy muy preocupada porque me cuesta salir a la calle; ahora siempre lo hago con mi marido o llamo a una amiga porque esas declaraciones no se dicen sin pensarlo.

¿Cuándo recibió esa amenaza que cuenta usted?

Eso ocurrió la semana anterior al pleno de mi toma de posesión.

A las puertas de la moción.

Sí, igual ellos ya me daban por perdida y me mandaron ese mensaje que te hace pensar. Cada uno que saque sus conclusiones, porque yo pienso estar en ese pleno, otra cosa es que me lo impidan.

¿Cuál es la hoja de ruta?

La moción se presenta este lunes en la Secretaría del pleno y hay diez días hábiles para su convocatoria, por lo que se convocaría el 13 de julio a las doce horas para someterla a votación. Es ese plazo; no se puede suspender ni cambiar.

¿Esta censura puede tener repercusión en otras administraciones? ¿Puede estar tranquilo Enrique Arriaga con su pacto con el PSOE en el Cabildo?

Cada uno tiene que ser responsable en la administración que está gobernando. Si Enrique Arriaga está tranquilo en su pacto con el PSOE y apoyado por Podemos y hay estabilidad no tiene por qué repetirse lo que pase en Santa Cruz. Aquí se nos hay ido un concejal y no había estabilidad. A parte de que era ya un gobierno débil formado por once concejales y el apoyo externo de tres de Podemos.

Compartir el artículo

stats