Agentes de la Policía Nacional y de la Policía Local de Puerto del Rosario procedieron a desmantelar el campamento alternativo que estaban montando los migrantes expulsados por mal comportamiento por Cruz Roja del Centro de Acogida Humanitaria (CAH), ubicado en El Matorral. Los agentes, además, procedieron a poner a disposición del Grupo de Extranjería del CNP a los 12 migrantes, todos de origen magrebí, que pernoctaban en las calles del citado barrio de Puerto del Rosario.

Tres de los migrantes que fueron entregados a Extranjería tenían una orden de devolución a Marruecos, por lo que fueron detenidos y serán enviados a un CIE bien en Gran Canaria o Tenerife para su expulsión a su país de origen. Los nueve restantes fueron puestos en libertad y continúan deambulando por las calles de Puerto del Rosario, dado que al ser expulsados del CAH no pueden ser acogidos de nuevo, según fuentes policiales.

La situación de preocupación que se generó entre los vecinos de El Matorral ante la presencia de los marroquíes durmiendo en sus calles posibilitó que cuatro vehículos de la Guardia Urbana y dos de Seguridad Ciudadana del CNP hicieran acto de presencia en el pueblo. Tras comprobar la identidad de los mismos fueron trasladados hasta la Comisaría de Policía de Puerto del Rosario, donde quedaron a disposición del Grupo de Extranjería.

En el CAH se encuentran actualmente acogidos cerca de medio millar de migrantes de diferentes nacionalidades, muchos de ellos desplazados desde Gran Canaria y Lanzarote, mientras que son escasos los efectivos de seguridad privada. El centro se encuentra gestionado por Cruz Roja. A estos hay que sumarle los 180 africanos que se encuentran alojados en las dependencias de la Misión Cristiana Moderna.

Denuncian que se quieren ir de la Isla porque los tratan “como presos” y el asilo tarda mucho

Los migrantes han denunciado ante los medios de comunicación las condiciones en que se encuentran. Un portavoz de los africanos señaló que queremos mandar un mensaje al Gobierno de España sobre las condiciones de los migrantes en Fuerteventura. Los migrantes están sufriendo en estos momentos en los campamentos. La comida no es buena y mucho menos los dormitorios. Nos tratan como presos, estuvimos en Las Palmas cuatro meses y luego nos transportaron aquí a Fuerteventura donde no sabemos cuándo vamos a salir de aquí”. Además, aclaran que “tenemos familias en España. Queremos que el Gobierno español nos ayude a llegar a nuestras familias. Estamos hartos de que nos traten así. Han cerrado el aeropuerto a los migrantes, las solicitudes de asilo tardan mucho en ser seguidas hasta casi seis o incluso ocho meses para tener estos papeles. Es inadmisible y queremos que el Gobierno reaccione lo más rápido posible”.

Los migrantes desean salir de Fuerteventura rumbo a ciudades como Madrid, Barcelona o Valencia, en territorio español, así como París y Bruselas. Por ello, se vienen dirigiendo a distintas agencias de viaje para sacar sus billetes y pode reunirse con sus familias. Sin embargo, se encuentran en el aeropuerto con la negativa de las autoridades policiales a que embarquen.

Sana Chehaib, presidenta de la Asociación Arenas Marroquí, señaló que recibió una llamada de socorro de los inmigrantes que fueron expulsados por Cruz Roja. “El motivo de ser expulsados es que un inmigrante lleva una semana y los voluntarios de Cruz Roja le dan pastillas para el dolor, pero el dolor persiste y piden ayuda sanitaria y le contestan que no hay, que si no le gusta lo que hay que cojan la puerta”. Además, añadió que “ante esta situación se fueron y han pasado la noche en la calle. Se han colado en el campo de fútbol de El Matorral para dormir, pero los vecinos llaman a la Policía para que los devuelvan al centro, ya que a las diez de la noche no pueden estar en la calle por las normas sanitarias de la covid”.